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Málaga y Sporting, una historia de lazos cruzados

Rondón celebra el gol al Sporting que valió la clasificación para la Champions.
A. R.

Los caminos del Málaga y el Sporting en los últimos años se han encontrado en bastantes ocasiones, además en momentos claves. El capricho del calendario ha colocado muchas veces el enfrentamiento entre ambos en las jornadas finales, lo que hizo que hubiese mucho en juego, ya fuese por un lado u otro, o incluso por ambos. Pero estos cruces hicieron que se forjasen lazos de unión entre ellos.

El primer encuentro entre ambos fue en la tercera jornada de la temporada 1998/1999. Un Málaga que resurgía de Segunda B y un Sporting que acababa de descender de Primera. El meteórico ascenso del equipo de Peiró a la máxima categoría separó sus caminos hasta que el equipo blanquiazul volvió a caer a Segunda en la 2006/2007.

La campaña siguiente es cuando se puede fijar el punto de unión entre ambos clubes. En esa temporada 2007/2008 los dos equipos lograron el ascenso a Primera División. La relación fue más que cordial a pesar de que los dos estuvieron en la pelea por los tres primeros puestos toda la campaña, con muchos guiños. Era de esperar por parte de Muñiz, con pasado sportinguista, que tuviese buenas palabras hacia el cuadro rojiblanco, pero el trato del ya fallecido Manolo Preciado hacia el Málaga fue tal que el técnico se hizo un hueco en los corazones de los aficionados malaguistas.

Caprichos del calendario

Durante cuatro cursos los dos equipos estuvieron en la máxima categoría. Por caprichos del destino, en todas ellas tuvieron que enfrentarse dentro de las cuatro últimas jornadas ligueras. En la primera de ellas, un Sporting necesitado vencía al Málaga en el Molinón y se acercaba a la salvación en un encuentro que finalizó 2-1 y en el que Weligton anotaba su primer gol como malaguista.

En la temporada 2010/2011 era el conjunto blanquiazul el que andaba con el agua al cuello. Era la jornada 36 cuando se enfrentaban y el descenso acechaba por Martiricos. Al final, los goles de Baptista y Eliseu dieron media salvación a los malaguistas.

Y al año siguiente, última jornada, el Málaga jugándose la clasificación para la Champions y el Sporting el descenso. La victoria fue para el conjunto de Pellegrini, 1-0 con un gol para la historia de Salomón Rondón. La alegría local se cruzaba con la tristeza rojiblanca por su vuelta a Segunda. Por ello, de forma espontánea, la afición del Málaga comenzó a gritar “¡Sporting es de Primera! ¡El año que viene, volvéis a ascender!”. Fue ya la confirmación de los fuertes lazos de unión que se crearon entre los dos equipos que ahora moran de nuevo en Segunda.

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