La 'Zona Cesarini' condena al Malagueño

De forma inexorable el Atlético Malagueño camina, de nuevo, hacia Tercera menos de 12 meses después del alegrón que se dio en Yecla. Quedan 11 partidos en el Grupo IV de Segunda División B y la salvación queda a 12 puntos. La hazaña es morrocotuda para el filial del Málaga, que necesitaría ganar más de la mitad de esos encuentros para meterse en la pelea por la permanencia. Una salvación que se alejó por diversos factores, aunque hay uno de ellos bastante curioso. No supo mantener la cordura en la 'Zona Cesarini' los últimos minutos de los partidos.

En lo que va del 80 al cierre de los encuentros el equipo que ahora dirige Manolo Sanlúcar, hasta la jornada 8 la manija era para Dely Valdés, perdió seis encuentros. Aunque el dato es más imponente sí se acota el intervalo. Cinco de esas derrotas fueron el minuto 87 en adelante. La última con el UCAM Murcia (0-3), donde Onwu anotó su primer gol en el 88. Antes se hizo lo propio con el Talavera (0-1), Cartagena (0-2), UD Almería B (1-0), Balompédica Linense (0-1) y Villanovense (1-0). Se da la circunstancia de que la mayoría son en casa, donde el Malagueño nunca se mostró sólido. En esos instantes finales sólo rascó un punto, cuando Joel Arimany igualó el choque con el Badajoz (2-2) en la Federación Malagueña.

Seis puntos al limbo, que si bien no son definitorios, sí serían de gran importancia. En lo puramente numérico, la permanencia estaría a mitad de camino. En lo moral, los jóvenes verían el objetivo más cerca. Seis puntos que cogen mayor valor al traducirse en dos victorias. Cuatro consiguió el filial blanquiazul hasta la fecha, lo que da alcance de la magnitud que supone la pérdida. Poco más que aprender puede hacer el cuadro malaguista, que afronta un tramo vital, nunca mejor dicho, de campaña. La heroica empieza este domingo en Jumilla (12:00 horas).