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“Amarrar”, “estilo”, “pedigrí”… y el penalti de Pau

Lance del Málaga-Cádiz (Foto: Paco Rodríguez).
D.M.

Sábado de taza y periódico, de conjugar el amargor del café con la dulzura del triunfo del Málaga ante un enemigo íntimo como el Cádiz. Sufriendo sabe mejor, dicen, pero el malaguista de a pie esta parquedad en los resultados le va a costar un trozo de vida, aunque sea para un final tan feliz como sumar tres puntos ante un rival enrachado y recuperar interinamente el liderato de LaLiga 1|2|3. Las crónicas, lógico, tienen diferente visión según las gafas del que las escribe. En los titulares de Málaga se conjugan términos como arte de amarrar, lealtad a un estilo o triunfo de pedigrí, mientras que en las crónicas de medios gaditanos o nacionales el foco del partido se comparte también con el arbitraje de Trujillo Suárez, que no estuvo exento de polémica.

Málaga Hoy: "El arte de amarrar"

Esto es el Málaga de Muñiz, es lo que debe ser, lo que intenta ser, lo que no puede dejar de ser. Un equipo diestro en el arte de amarrar, que si se adelanta no pierde el compás y que es capaz de darle cierta belleza al verbo sufrir. Duerme líder el conjunto de Martiricos después de vencer a un gran Cádiz que llegaba tras siete triunfos consecutivos. Porque si un pecado cometía el Málaga en las últimas citas, es que no terminaba de encontrar su yo. Hay quien dirá que es una cuestión de detalles, pero hubo unos intangibles ante el Cádiz para derribar el muro amarillo que no visitaron Martiricos en los partidos más recientes (tanto los que ganó como los que no).

La Opinión de Málaga: "Triunfo de pedigrí"

Hay triunfos y triunfos. Y el de anoche al Cádiz es de los que tienen la etiqueta negra, un pedigrí especial. Lo es porque los amarillos llegaban enrachados, tienen un gran equipo y porque el Málaga CF necesitaba que La Rosaleda volviera a ser un fortín tras el tropiezo con el Granada. Y además, el conjunto de Muñiz también necesitaba encadenar de nuevo dos victorias seguidas, algo que no hacía desde el pasado 15 de septiembre, que ya ha llovido para un equipo aspirante al ascenso.

SUR: "El Málaga, fiel a su estilo, frena en seco al Cádiz"

Imagino a 'Fefe' González en el Cielo con su bandera malaguista al cuello acompañado de Manolo Becerra animando sin parar, sufriendo hasta el último segundo, dándose codazos por los nervios y saltando eufóricos tras el pitido final. Porque fue de esas noches de partido exigente, de más intensidad que juego y también de felicidad acompañada de un respiro hondo. Vamos, Fefe, Manolo, lo que ha sido nuestro Málaga casi toda la vida.

AS: "El Málaga frena a un Cádiz a quien se escamoteó un penalti"

El Málaga terminó con la gran racha del Cádiz (ocho partidos sin perder y siete triunfos seguidos) gracias a un gol de Fede Ricca. Fue un partido de muchísimo trabajo, exceso de nervios, escasa calidad, y marcado por el escandaloso penalti que el colegiado tinerfeño, Trujillo Suárez escamoteó a los amarillos por una mano dentro del área de Pau Torres que además acarreaba segunda tarjeta amarilla y consecuente expulsión. Jugada de VAR. Pero esta maravillosa y recurrente tecnología punta no se utiliza en Segunda.

MARCA: "Asalto al liderato"

El Málaga es el nuevo líder de Segunda después de acabar con la racha del Cádiz, que se detuvo en siete victorias, gracias a un gol de Fede Ricca a 20 minutos del final de un encuentro que fue un derbi de los de antaño. Agresividad, intensidad, nervios a flor de pie, pocas oportunidades, emoción y polémica. Los gaditanos reclamaron, y con razón, una mano de Pau Torres dentro de su área poco antes del descanso que, de haberla vista el colegiado, podría haber cambiado el rumbo del duelo.

Diario de Cádiz: "La buena racha llega a su fin"

Alguna vez tenía que acabar la excelente racha. El Cádiz CF se volvió humano con una derrota que puso fin a la brillante secuencia de siete victorias consecutivas. Cayó 1-0 en el estadio del Málaga, uno de los favoritos al ascenso, arrastrado por una deficiente segunda parte que hizo inútil uno de los primeros periodos más consistentes de la temporada. Cuando al otro lado está el rival más poderoso de la Liga, la única manera de puntuar es con noventa y tantos minutos de alto nivel y al Cádiz le faltó la mitad. Siempre quedará la duda de qué hubiese sucedido si el árbitro no hubiese escamoteado un clarísmo penalti a favor de los amarillos al borde del descanso. El colegiado influyó en el desenlace del encuentro.

ElDesmarque Cádiz: "La racha triunfal del Cádiz la rompe un árbitro"

El Cádiz se quedó en siete partidos ganados de manera consecutiva. Perdió en Málaga en un partido marcado por el clamoroso penalti no señalado a favor del equipo amarillo en el primer periodo, con empate a cero en el marcador. Después marcó el Málaga y el colegiado Trujillo Suárez perdonó la expulsión a N'Diaye cuando los de Cervera buscaban el empate a la desesperada.

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