Muñiz: "Cuando te dan un regalo y te lo quitan se te queda cara de tonto"
Se vio a un Muñiz serio en la sala de prensa de El Molinón tras el empate del Málaga ante el Sporting. Y es normal, porque su equipo lo tenía todo para llevarse los tres puntos de Gijón, pero se despistó en la última jugada del partido y acabó con la cara partida. Así lo explicó el entrenador tras el encuentro: "No sé qué contestar. Te vas contento porque sumas, pero triste porque teníamos la victoria en la mano. Pero la victoria la consigues cuando el árbitro pita el final. Cuando tienes tres puntos ganados, es una pena perderlos en ese minuto final. Tenemos que ser más exigentes, hicimos el trabajo para llevarnos los tres puntos y los teníamos en la mano... Pero no te das cuenta, te los quitan y se acabó el partido".
"Estamos viendo continuamente en la categoría esas situaciones, pero cuando te toca vivirla se te queda una cara de tonto que no se te quita en todo el día. Si esto nos sirve de aprendizaje, perfecto, pero nos marchamos con sensación de poder haber ganado los tres puntos, por juego y resultado. Te descuidas un momento... Esta es la Segunda División, en algún momento de la temporada te pasará a favor, siempre pasa. Cuando te dan un regalo y te lo quitan te quedas una cara de tonto que es mejor que no te lo den. Pero hicimos un trabajo muy bueno como para haber ganado ante un gran equipo", añadió el técnico asturiano.
El Málaga no gana a domicilio desde el 3 de septiembre ante el Almería. Ha sumado sólo dos de los últimos 15 puntos fuera de casa, pero al entrenador blanquiazul no le preocupan en exceso esos números: "Cuando llegas al final del recorrido, vas a tener un número de puntos. Si consigues el objetivo bien, y sino pues nada. Nadie va a preguntar dónde consigues los puntos, fuera o en casa. O llegas o no, y tenemos que intentar llegar".
Muñiz, nacido y criado en Gijón y formado como jugador en el Sporting, fue cuestionado por la situación del equipo asturiano: "Siento no opinar de otro equipo, bastante tengo con ver el mío y solucionar nuestros problemas. El Sporting es y será siempre un gran club, máximo respeto a los que están trabajando. Hay que dejar a la gente de dentro trabajar y opinar desde fuera lo menos posible. Cuando eres de un equipo lo eres en las buenas, en las malas, siempre. Es el club lo que queda, siempre está. El aficionado del Sporting estará con el equipo, sienten los colores como el que más y tienen que entender que los más disgustados son los entrenadores y jugadores. Se necesita tranquilidad, porque así es más fácil llegar a las metas".