La espera acabó a los 228 minutos

El Málaga ha tardado más de dos partidos y medio en ver portería en esta Liga 2017-18. Tuvo que ser en el 48 de su partido ante Las Palmas y lo firmó un defensa, Diego González, de cabeza. Después de 228 minutos de competición consumidos, el zaguero gaditano acabó con la sequía y permitió por fin al malaguismo celebrar su primer gol de la temporada.

No anda fino el conjunto blanquiazul en lo que a producción ofensiva se refiere. Le cuesta generar fútbol y ocasiones y tuvo que fabricarse el gol en una jugada de estrategia. Nada más volver del vestuario, y con el marcado 0-1 (Viera marcó al filo del descanso), Recio botó una falta y Diego remató sin oposición y batió a Chichizola, que no pudo hacer nada ante el testarazo del defensa.
El Málaga siguió rondando el gol en la recta final del choque, especialmente tras el 1-2, obra de Calleri, un delantero que curiosamente estuvo este verano en la agenda blanquiazul. Pero hasta ahora, y después de 270 minutos de juego, el equipo de Míchel sólo ha sido capaz de generar un gol, y a balón parado.