Déjà vu en Riazor

Como si nada hubiese pasado, como un déjà vu, como el Día de la Marmota... El Málaga de nuevo se planza en Riazor para medirse al Deportivo después de su enfrentamiento copero del miércoles.

Ambos entrenadores y sus futbolistas anuncian un partido bien distinto. Más intenso, tanto en el césped como en la grada. De hecho, este es el que vale, el que importa en realidad. El de Copa dejó mucho que desear.
Después de dos derrotas ante el Atlético y el Real Madrid, el Málaga no llega tocado, más bien lo contrario. Pero no puede retrasar más tiempo la siguiente victoria. Porque antes del pequeño Tourmalet, venía con un cinco de cinco. Y bien sabe Gracia que igual que una tendencia te lleva al alza, otras inercias te conducen al desastre.
Tendrá que afrontar este partido sin tres hombres fundamentales: Amrabat, Juanmi y Sergio Sánchez. Esto maximiza el nivel del reto blanquiazul. En defensa hay dudas porque Angeleri no termina de funcionar. Torres está a la espera. En ataque, salvo sorpresa, Duda y Santa Cruz serán los referentes. El paraguayo, sin Amrabat, ha conseguido marcar en los dos últimos partidos de Liga y en jugada. Está con ganas.
El Depor, en principio, seguirá con una línea de cinco, con carrileros abiertos, y tratando de desactivar las transiciones veloces del Málaga. El tablero es el mismo, pero entran nuevas piezas. Partido igual, partido distinto.
 
Posibles alineaciones:
Deportivo: Fabricio; Laure, Lopo, Sidnei, Insúa, Luisinho; José Rodríguez, Wilk, Medunjanin; Cavaleiro y Postiga.
Málaga: Kameni; Rosales, Angeleri, Weligton, Antunes; Camacho, Darder; Samu, Duda; Samu Castillejo; y Santa Cruz.