Lucas es alérgico a los cambios bruscos en la portería
Con el cambio de estación y las oscilaciones de temperaturas surgen las alergias y quien las padece sabe bien de qué se trata. Tras el partido frente al Rayo, que el Levante UD perdió por 4-2 en un paupérrimo partido, se ha reabierto el debate sobre algunas posiciones en el equipo granota y, concretamente, de la portería. Pero Lucas Alcaraz en el pasado ya demostró, como cuando sube fuerte el termómetro, que es alérgico a los cambios bruscos y, de hecho, Diego Mariño jugó tocado el partido frente a los de Paco Jémez.
La prueba de que Mariño no estaba al cien por cien es que la pasada semana, hasta el día de la previa, no se ejercitó con el grupo y este lunes en el regreso al trabajo tampoco lo hizo. Y es que Alcaraz, al menos en su última década en los banquillos, siempre parece haberse declarado enemigo de los cambios en la portería. Empezando por su última etapa en el Granada. El pasado ejercicio Roberto era su titular indiscutible bajo palos y no hizo ningún cambio hasta que éste no tuvo problemas físicos. Curiosamente, a su compañero Karnezis le tocó sustituirlo frente al Barcelona y, lejos de ser una papeleta, el griego hizo el partido de su vida y los nazaríes vencieron al conjunto culé, restándole muchas posibilidades de ganar el campeonato liguero. El heleno jugó varios partidos y después regresó el meta titular.
En el Almería esta máxima la lleva Lucas a sus cotas más altas cuando lo dirigió en la campaña 2011-12. Esteban jugó todos los partidos de aquella Liga Adelante y a su compañero le tocó calentar banquillo durante toda la temporada. Un año antes, con el Córdoba, el elegido por Alcaraz fue Raúl Navas, que jugó sólo 17 partidos y sólo abandonó el marco cuando se lesionó para dejar paso a Alberto durante 25 jornadas y una para Coca. Y es que en la anterior campaña Navas ya había sido el designado por el entrenador granadino, que lo puso en el once en 36 ocasiones por seis de Alberto, que sólo pudo defender la camiseta franjiverde en seis duelos.
Tampoco se había mostrado muy amigo de los cambios en el Recreativo de Huelva, en 2008-09. Y si no que se lo digan a Roberto Jiménez, que tuvo que ver cómo Asier Riesgo era titular en los 38 partidos. O a Juanmi en la etapa de Lucas en el Murcia que sólo ocupó el sitio de Antonio Notario cuando los pimentoneros certificaron su meteórico ascenso a Primera en 2006-07. Fabián Carini, un internacional por Uruguay, también lo padeció y sólo ocupó el puesto del portero ex del Sevilla o del Mestalla por lesión de éste.
En el Levante Lucas Alcaraz se ha mostrado como un entrenador al que, en el resto de posiciones del campo, tampoco le gustan las variaciones demasiado traumáticas aunque, como él mismo siempre ha recordado en rueda de prensa y con sus alineaciones, incluso cuando el equipo ha ganado siempre ha hecho algún retoque en el once titular. Otras zonas como el eje de la defensa o el doble pivote, con Pape Diop de momento incapaz de entenderse con Camarasa, también están en el punto de mira.