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Con él empieza todo

Ter Stegen se lanza para despejar al larguero el disparo de Terrier.
Amante del deporte, en ElDesmarque desde 2015.

Una vez más, el FC Barcelona tuvo el apoyo de Marc André ter Stegen para dejar la portería a cero por tercer partido consecutivo. Las acciones del cancerbero mantuvieron el 0-0 y dieron alas para que su equipo buscara la victoria, aunque no estuvieron sus compañeros tan acertados de cara a gol como él bajo los palos.

Ya en los 10 primeros minutos, el alemán tuvo que trabajar por partida doble. Y de qué manera. Primero, volando abajo para sacar un duro disparo de Aouar pegado a la base de su poste izquierdo.

La siguiente fue la más destacada. Terrier, una de las novedades en el once de Genesio, le pegó con todo desde fuera del área. Ter Stegen sacó una mano prodigiosa despejando la pelota al larguero y después se levantó como una exhalación para llegar a la caída del balón antes que los delanteros lioneses.

Ter Stegen es uno de esos porteros capaz de salvar un gol cantado con uno de esos vuelos dignos de póster de habitación

Y no es la primera vez que las paradas del meta teutón sirven para salvar un partido. La última gran actuación del internacional alemán se dio en San Mamés hace 10 días. Allí, mantuvo el marcador de su portería a cero a pesar de los numerosos intentos del Athletic. Susaeta e Iñaki Williams aún se están preguntado si un ser humano es capaz de sacar manos de este calibre.

Pocas dudas existen ya en torno a la presencia de Ter Stegen como uno de los mejores porteros del mundo. Precisamente en la Champions League sufrió uno de los goles sobre el que le cayeron más críticas. Fue en Roma, con un disparo de Florenzi desde el centro del campo que llovió del cielo y terminó entrando en la red tras golpear en el palo.

Ese gol y uno de San José en la Supercopa de España de ese año marcaron el punto más bajo de un portero que, por aquel entonces, peleaba por un puesto con Claudio Bravo. Sin embargo, el germano se impuso finalmente al chileno (la edad también ayudó) y ahí comenzó Ter Stegen a ganarse su puesto en el olimpo de las porterías mundiales.

Dos años y medio después, nadie duda de que gran parte de las opciones del Barça para volver a conquistar la Champions (que nos disculpe el chico que viste el '10' azulgrana) pasan por que Ter Stegen esté acertado en los partidos decisivos de la competición.

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