La reivindicación de Aleix Vidal

El Barça cosechó una abultada a la par que engañosa victoria ante el Girona, merced al planteamiento de un Pablo Machís que logró noquear por momentos las opciones de los culés. Ernesto Valverde valoró al término del partido la actitud del equipo y el brillo de un jugador por encima del resto. Ese es Aleix Vidal, que volvía a la titularidad un mes después y que rayó un notable nivel en el tridente de ataque.

Aleix se reivindicó y de qué manera en Montilivi. El jugador de Valls convenció al técnico blaugrana e hizo méritos para ser valorado como merece. En un encuentro apretado, el reconvertido a extremo brilló en los espacios, fue decisivo en la zona de tres cuartos y supuso un quebradero de cabeza para la retaguardia local. Fruto de ello fue el segundo gol. Tras una notable internada, el extremo logró llegar hasta la línea de fondo y se inventó un taconazo que acabó colándose en el arco de Iraizoz.
A pesar de acumular apenas 170 minutos, el culé acumula ya dos asistencias erigiéndose como un relevo de garantías dejando clara su validez en los esquemas de Alejandro Valverde. El propio entrenador valoró su actuación y la polivalencia que atesora: "El que un jugador pueda jugar en varias posiciones es una virtud, no un defecto. Puede jugar atrás, adelante como ya ha sucedido en otros equipos... ya veremos cómo lo utilizaremos".