Beto da Silva, un papá entregado a Dios

Llegó a última hora y de madrugada. Fue el fichaje sorpresa del Deportivo en el cierre del pasado mercado de verano. A Juan Antonio Anquela no le sonaba pero sí le suena a todo su país, Perú. Desde su incorporación al Dépor, los peruanos viven pendientes de Beto da Silva y se muestran preocupados por los pocos minutos con los que ha contado hasta el momento el delantero cedido por el Tigres de México.

El atacante blanquiazul aguarda con esperanza su momento. El próximo 28 de diciembre cumplirá 23 años y, a pesar de su juventud, ya se ha estrenado como padre y cuenta con un amplio currículum futbolístico. Beto fue papá hace dos años y su hijo es el centro de todas sus miradas. Así se puede comprobar en la cantidad de fotografías e historias que comparte en sus redes sociales.

La selección, un sueño desde niño

Beto da Silva inició su carrera en el Sporting Cristal. Antes de su llegada al Tigres había disputado 26 partidos con el PSV sub 21, así como 25 en la liga peruana, 12 en la brasileña y 11 en la mexicana, sumando casi un centenar en competiciones profesionales, con 14 goles y 8 asistencias. Además de estos clubes, también ha defendido los colores del Grêmio de Porto Alegre, el Argentinos Juniors y el Lobos de Puebla.

Son varios los equipos por los que ya ha pasado el peruano pero su mayor ilusión desde niño ha sido vestir la camiseta de la selección de su país. Para Beto, estar en la selección es lo más grande desde el punto de vista futbolístico. Hasta el momento, el punta del Dépor ha disputado 25 partidos con las diferentes selecciones peruanas, incluidos 6 con la absoluta.

La importancia de la religión en su vida

Beto da Silva se declara muy cristiano y muy seguidor de Jesús. A Dios le pide cada día salud para su familia y considera que haberle entregado su vida le ha dado fuerza para superar momentos muy difíciles y hacerle mejor persona. Toda su vida, Beto ha sido muy religioso. Su padre es evangelista y a Cristo agradece también sus goles.

Creer en Dios y en su fuerza es fundamental para Beto, también amante de los tatuajes. Tiene varios por todo el cuerpo y uno de ellos, en su cuello, lleva escrito en inglés el verbo "creer" (believe). En el Deportivo, Luis César también cree que ha podido llegar el momento de Beto. El peruano ya dispuso de algunos minutos al final del encuentro contra el Extremadura. De sus botas salió una de las ocasiones más claras del partido. La afición también cree que es tiempo de ver jugar a Beto. El deportivismo reza para salir de la grave situación deportiva y Beto está deseando marcar goles.