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Es Noticia

Nunca llovió que no escampara

Borja Valle celebra su gol ante el Numancia junto a Quique González (Foto: LaLiga).
Carlos Rosende

Con el presidente y su Consejo renunciando en bloque a sus cargos, la continuidad de Carmelo del Pozo al frente del área deportiva sujeta a la llegada de una nueva directiva y hasta cuatro cambios en la alineación titular respecto a la última derrota contra el Extremadura, el Deportivo de José Luis Martí medía el estado de su aguda crisis ante un Numancia también agobiado por la peligrosa dinámica en la que se encuentran inmersos los sorianos. Pero esta vez el equipo sí respondió, consiguió una cómoda ventaja de dos goles y logró administrarla no sin sufrimiento al jugar con diez hombres durante los últimos 20 minutos por la expulsión de Somma. Todo un alivio. 

El míster mallorquín devolvió al once a Fede Cartabia en el lugar de Pedro Sánchez, ocupó la vacante dejada por el sancionado Pablo Marí con Michele Somma, ubicó a Álex Bergantiños en la plaza de Didier Moreno y alineó al recuperado Carlos Fernández junto a Quique González en la punta del ataque. Enfrente, un Numancia sin varias de sus piezas habituales: Juan Carlos, Unai Medina y Alain Oyarzun.

El duelo comenzó de la mejor manera posible para los intereses blanquiazules: solo corría el tercer minuto de juego cuando Borja Valle recuperó la pelota en tres cuartos de campo, hiló una pared medida con Quique González y, sin oposición, batió con suficiencia a Gaizka Campos en el mano a mano. El acierto de los futbolistas de ataque, unido a la fragilidad defensiva local, aclaraba el camino para los coruñeses.

Valle y Somma castigaron la fragilidad defensiva del Numancia

Sin tiempo para digerir el 0-1, el Deportivo golpeó por segunda vez en el minuto 9. A la salida de un saque de esquina botado por Fede Cartabia desde el perfil izquierdo, Somma, completamente solo, cabeceó al fondo de la red el envío 'tocado' de su compañero argentino. Segunda concesión y segundo correctivo inflingido por un Dépor certero en el remate. Desde entonces y hasta el descanso, faena de aliño para el conjunto herculino, replegado en bloque bajo a la espera de poder castigar por tercera ocasión la permisividad local.

Gus Ledes, Higinio y Markel Etxeberría tratarían de perforar el caparazón coruñés con disparos desde media distancia, pero ninguno de los zapatazos de los 'rojillos' llegó a poner en aprietos a Dani Giménez.

Somma celebra su gol ante el Numancia (Foto: LaLiga).

El encuentro discurría sin sobresaltos hasta que Somma vio su segunda cartulina amarilla de la noche en el minuto 69, en un duelo aéreo con Diamanka en el área del Numancia. La decisión, rigurosísima puesto que el central italiano apenas roza al oponente con su brazo y no tenía intención alguna de cargarle, alteró por completo el tablero. El zaguero del Dépor había visto la primera amonestación en el minuto 45. Esta sí había sido justa, puesto que Somma trabó por detrás y sin opciones de jugar la pelota a David González en tierra de nadie.

Obligado a protegerse al perder a un futbolista, Martí dio un par de pasos atrás con la entrada de Iñigo López y Pedro Sánchez. También la de Vicente. A lo que López Garai, quien ya había apostado por Guillermo diez minutos antes, respondió confiando en otro '9': Borja Viguera. El Deportivo achicaba agua y el Numancia busca acortar distancias con más corazón que cabeza. La ocasión más clara la tendría en su testa Guillermo, pero el cabezazo del punta bilbaíno se encontraría con el larguero en su camino hacia el gol.

In extremis, el propio Guillermo acortaría distancias con un remate de cabeza espectacular previo centro librado de Ganea. Sin embargo, la reacción y el acoso final de los locales no tendría el premio deseado por la parroquia numantina y el Dépor terminaría embolsándose los tres puntos. Ya era hora.

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