Cinco curiosidades sobre Sulley Muntari

El Deportivo anunció esta tarde la llegada de Sulley Muntari (Ghana, 1984) para entrenarse a las órdenes de Clarence Seedorf, con quien coincidió en su paso por el Milan. El futbolista africano se ejercitará con el plantel blanquiazul y serán los técnicos quienes valoren su posible incorporación a título definitivo.

1.- El Deportivo buscaba un mediocentro defensivo... y Muntari no lo es: el ghanés es -o era- un centrocampista capaz de cubrir muchos metros en la medular, con una buena pierna izquierda y, sobre todo, mucho despliegue. Se trata de un jugador respetado por sus compañeros, con una amplia trayectoria en la élite y que ofrecía su mejor versión jugando con libertad, no guardando la posición ni controlando los espacios y las distancias por delante de los centrales. Su agresividad en los contactos y la energía que transmitía sobre el césped nunca fueron puestas en duda, pero sus últimas experiencias profesionales (Al-Ittihad y Pescara) no han sido ni mucho menos satisfactorias. En consecuencia, y tras acumular diez meses en el paro, su estado físico es una incógnita. 
2.- Muntari avaló la llegada de Seedorf al Milan como técnico: "Seedorf lo sabe todo sobre el fútbol. Incluso cuando era jugador ya ofrecía ayuda a todos los compañeros que se la solicitaban, así que imagínate ahora que es entrenador", comentó Sulley en febrero de 2014, días después de que el actual preparador del Deportivo se hiciese cargo del equipo rossonero. La de Muntari fue una de las voces del vestuario que respaldó la contratación de Seedorf tras la destitución de Massimiliano Allegri como técnico milanista. Cuatro meses después, el neerlandés abandonaría el Milan por decisión de la dirigencia, Inzaghi se haría cargo del equipo y Muntari dejaría de disfrutar de oportunidades.
3.- Expulsado del Mundial de Brasil 2014 por indisciplina: Muntari fue obligado a abandonar la concentración de su selección nacional y suspendido indefinidamente por la federación ghanesa al cometer un acto grave de indisciplina en el transcurso del Mundial 2014. El centrocampista nacido en Konongo fue acusado de golpear a un miembro del staff técnico en la previa del duelo contra Portugal, el último de la fase de grupos. Inmersa en una situación convulsa, la selección africana también prescindió de Kevin Prince Boateng, que había faltado al respeto al seleccionador Kwesi Appiah. El jugador a prueba en el Deportivo nunca ha vuelto a entrar en una citación de su combinado nacional.
4.- En el futuro, ni entrenador ni director deportivo, sino mecánico: el veterano futbolista ghanés explicó hace menos de 12 meses que no tenía en mente dejar el fútbol profesional. Su intención era la de continuar en activo durante "seis o siete años más", hasta los 40 años. "¿Qué pasará cuando me retire? Yo no me veo a mí mismo como entrenador o director deportivo, soy propietario de dos concesionarios de coches. ¿De qué me veo? Como mecánico, con las manos llenas de aceite", comentó en una de sus entrevistas más recientes.
5.- Criticó duramente a la Serie A y a la FIFA por no luchar contra el racismo: en abril de 2017, Muntari abandonó por voluntad propia un Cagliari-Pescara ante la pasividad del colegiado del choque frente a los cánticos racistas emitidos por algunos aficionados sardos. "Todo el mundo ha visto lo que pasó, había un niño que cantaba esos cánticos con sus padres al lado. Le regalé mi camiseta y le dije que eso no se hacía, para darle un ejemplo positivo", explicó Muntari. "En la segunda mitad pasó lo mismo con los hinchas del fondo, y se lo dije al árbitro y me contestó que no debía hablarle al público, haciéndome enfadar. Insistí, diciendo que tenía que tener coraje y parar el partido. Un árbitro debe ocuparse de todo, no solo de pitar", comentó enrabietado.