La sonrisa de Álvaro Queijeiro, el gran capitán

Lesionado en un hombro en las últimas jornadas de la liga regular, Álvaro Queijeiro reapareció en el segundo tiempo del decisivo choque del Deportivo B ante el Cacereño y se convirtió en protagonista destacado al anotar el 2-0 en los últimos minutos y aportar la tranquilidad necesaria para sacar adelante la eliminatoria: "Llevamos toda la semana mirando cómo evolucionaba el hombro, si podía jugar o no", apuntó el mediocentro.

 
"Una sensación de alegría, de liberación, por todo el año trabajando. Es la recompensa", destacó Álvaro al ser preguntado por sus sensaciones personales y también por las colectivas tras lograr el objetivo marcado a principio de temporada.
"Teníamos la presión de ascender pero el club nos transmitió en todo momento que confiaba mucho en nosotros", comentó. "Este es un un logro personal pero colectivo, esto es un equipo. Hemos conseguido el ascenso porque nos lo merecíamos".
Respecto a la gris primera media hora de juego del Fabril en Riazor, Queijeiro, que lo observó desde el banquillo, indicó que "fueron más las ganas de querer hacer todo muy rápido, nos precipitamos un poquito. A partir de la media hora nos hicimos dominadores del partido y fuimos el Fabril de siempre", concluyó.
Las palabras del míster sobre Queijeiro:
Cristóbal Parralo: "Álvaro [Queijeiro] me dijo ayer que hoy podía aportar... y yo no lo dudé".