Las claves en la mejoría del Fabril

El Fabril comanda la Tercera gallega con autoridad. El filial deportivista camina con paso firme hacia el título de liga tras sumar 43 puntos de los últimos 51 en juego y en la actualidad mantiene cinco de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, el Rápido de Bouzas, a quien doblegó con solvencia (3-0) en Abegondo el pasado 27 de febrero.

 
Más allá del talento de Pinchi y Galán desde los extremos y de la solvencia de Queijeiro y Monsalve, dos de los pesos pesados en el vestuario, tres han sido las claves en la mejoría del segundo equipo blanquiazul.
Quique Fornos y los 553 minutos sin encajar un gol:
La presencia del coruñés Quique Fornos en el eje de la zaga junto a Nacho Monsalve ha dotado al equipo de mayor seguridad a la hora de defender el juego directo de los rivales, uno de los grandes puntos de mejora del Fabril durante toda la primera vuelta. Fornos no se complica: es un central expeditivo y riguroso en la marca que se ha ganado la confianza del míster a base de completar actuaciones notables ante algunos de los mejores delanteros de la categoría. El filial ya no se siente vulnerable cuando el oponente decide cargar su fútbol de ataque sobre puntas muy físicos, y buena parte del crecimiento en este aspecto del juego viene propiciado por un chico de la casa que no bajó los brazos cuando su entrenador se decantaba por otras opciones. 
Edu Expósito asume el mando:
El futbolista más completo del Fabril a todos los niveles ha explotado en 2017 y su juego entre líneas está siendo capital para que Óscar Pinchi y Borja Galán puedan marcar diferencias desde ambas bandas. Se entiende de maravilla con Queijeiro, con quien comparte la línea de medios junto a Manu Molina, y abarca una cantidad de metros extraordinaria. Ágil, inteligente en la toma de decisiones con y sin balón, mezcla buenos recursos técnicos en espacios reducidos con una gran capacidad de sacrificio. A menudo se descuelga para ofrecer líneas de pase por delante de la pelota y no rehuye el golpeo desde media distancia. Acumula cuatro goles y por condiciones y edad (agosto de 1996) es, junto a Pinchi, uno de los proyectos más sólidos del Deportivo B.
Ruptura de Edu Expósito, control orientado y posterior disparo con la pierna izquierda cuyo rechazo aprovecha Óscar Pinchi:

Borja Domingo es la solución:
Autor de 16 tantos, tres menos que Óscar Pinchi (19), Borja Domingo se ha consolidado como el delantero centro de un equipo con clara vocación ofensiva. Su inclusión regular en el once no ha llegado únicamente por sus buenas cifras goleadoras, sino que el sacrificio del valenciano en tareas defensivas resulta fundamental para que el Fabril pueda recuperar la posesión de la pelota en campo rival. Es el primero en iniciar la presión, se vacía durante los noventa minutos y ofrece una salida en largo a los centrales cuando el equipo no encuentra soluciones asociándose. A día de hoy es indiscutible.