El cachorro vuelve a rugir tras caer en pretemporada: "Unai Núñez me ha ayudado mucho"

Víctor San Bartolomé está muy cerca de sentirse futbolista. El segundo capitán del Celta Fortuna lleva toda la temporada lesionado tras sufrir una fractura de tibia este verano. El jugador ha vivido meses duros, muchas horas de trabajo en solitario. Reconoce no haberse sentido solo en este tiempo, sus compañeros siempre han estado pendientes de él. También Unai Núñez, que como San Bartolomé se formó en las categorías inferiores del Athletic Club. Ahora espera dar un paso más, el volver a tener minutos.

"Vine en pretemporada, tuve un problema de tobillo que tuve una fractura de la tibia. Desde el principio sabíamos que iba a ser un proceso largo pero han sido muchos meses de trabajo, de recuperación y la recta final, que ya puedo hacer trabajo con los compañeros", explicó San Bartolomé.

El centrocampista, al que Giráldez quiere reconvertir a defensa, desveló que "en estos procesos de estar lesionado tienes que trabajar más y siempre tienes que venir antes, trabajo con los fisios, trabajo de gimnasio para recuperar la zona lesionada. Siempre tienes que trabajar mucho más, luego sales al campo, trabajas lo que puedes y tienes otro trabajo extra". Continuó explicando su proceso de recuperación: "Al final es sumarle horas para hacer más trabajo para compensar esa lesión".

El futbolista tuvo palabras de agradecimiento para todas las personas que han estado a su lado en estos meses, especialmente para Unai Núñez: "Con todo el mundo, la verdad que el trato es maravilloso". "Siempre me he sentido uno más, no me he sentido aparte. Todo el mundo intenta preguntarte, estar encima para que en esos momentos duros, de estar apartado, que sean mucho más fáciles. Que esté Unai Núñez me ayuda mucho. Llegamos los dos y me ha ayudado mucho".

En su ausencia el Celta Fortuna está cuajando un gran temporada. San Bartolomé asegura que no es casualidad: "Veo el trabajo del día a día, cómo trabajamos, el nivel tanto personal como futbolístico que tenemos. Al final no es casualidad, trabajamos muy bien, nos esforzamos día a día y los resultados se ven. Hemos tenido bajas importantes y no contábamos con ellas pero el trabajo del día a día, la gente que viene del Gran Peña... todo el mundo suma y, juegue quien juegue, da el nivel. Viendo cómo se comporta el equipo, cómo jugamos, te da más ganas de querer estar dentro y con muchísima ilusión de poder ayudar".