Visitar a un colista es como bajar a los infiernos

Visitar a un colista debería garantizar un buen resultado, al menos aumentar las posibilidades de lograrlo, eso dice la teoría, pero en la práctica, al menos para el Celta de Vigo, es una pesadilla. Desde 2003 los vigueses no suman una victoria visitando al último de la clasificación.

Desde el 0-4 logrado en octubre de 2003 ante el Espanyol, que marchaba colista en la séptima jornada de Liga, el Celta no ha vuelto a sumar una victoria tras disputar seis partidos más en estas circunstancias. Así lo apunta la cuenta Afouteza e Corazón, referente para el celtismo, especializada en estadísticas e historia del Celta de Vigo.

Desde el último ascenso, logrado por Paco Herrera en la temporada 2011/12, el Celta ha visitado a seis colistas. El balance es de cuatro derrotas y dos empates. Los celestes perdieron ante el Deportivo (3-1), Mallorca (1-0), Málaga (2-1) y Leganés (3-2).

Los dos resultados positivos fueron un empate ante el Huesca, un 3-3 agónico con Fran Escribá en el banquillo. Un partido en el que Boudebouz logró el empate en el 81' tras desaprovechar un 0-2 obra de Brais Méndez y Iago Aspas.

El otro empate fue ante el Espanyol, la última jornada de la pasada temporada. Los pericos estaban ya descendidos y el Celta necesitaba ganar para evitar el descenso en caso de victoria del Leganés.

No logró el Celta la victoria y dependió del empate que sumó el Real Madrid ante el Leganés tras los errores de Óscar Rodríguez y el posible penalti de Jovic, que tocó el balón con la mano. El Celta se salvó pero sumó un nuevo encuentro sin lograr la victoria ante el colista, situación que se repetirá este lunes 26 de octubre ante el Levante.