Durante su intervención en rueda de prensa, Óscar García analizó los posibles cambios que podría incluir en el partido del Celta de Vigo ante el CD Leganés, además de destacar el buen trabajo que vienen realizando los suplentes en cada sesión y cada vez que tienen minutos. También tuvo un gesto para Santi Mina, que atraviesa unos días difíciles tras las acusaciones de las que ha sido protagonista a lo largo de esta semana.
"Siempre hay que mover algo. No soy de los que piensa que si las cosas funcionan no hay que tocar nada, porque somos exigentes. Quiero que el equipo tenga un nivel de exigencia muy alto, que todos se sientan importantes, que todos pueden ayudar"
"Cuando las cosas van bien es el primer paso para seguir mejorando. Para seguir mejorando hay que hacer más cosas. Ya os dije que nunca estoy satisfecho del todo, pienso y creo que siempre se puede mejorar".
"Eso me demuestra que estamos llevando bien a la plantilla, que todo el mundo que sale quiere aportar y demostrar que el entrenador, a lo mejor, se equivoca de no ponerlo desde el principio. Cuando nosotros planteamos un partido, lo planteamos a 95-96 minutos, sabiendo, muchas veces, que los jugadores que salen de refresco en la segunda parte pueden ser más decisivos, incluso, que los que juegan de inicio".
"Desde que estoy aquí es la semana que ha entrenado mejor. Si le ha afectado, le habrá afectado para bien, porque ha entrenado muy bien".
"No quiero ceñirme a un solo sistema porque el fútbol te da la posibilidad de jugar con varios sistemas, y esa es la riqueza de un equipo, que se puede adaptar a diferentes sistemas de un equipo y de unos jugadores", dijo para terminar.