Hoedt, Boudebouz y Boufal, con escasísimas opciones de seguir
El futuro de los jugadores cedidos al Celta este curso parece claro, sólo Lucas Olaza parte con serias opciones de seguir en Vigo más allá del 1 de junio. Wesley Hoedt, Ryad Boudebouz y Sofiane Boufal dejarán el equipo, de forma contractual, este 30 de junio para volver a sus respectivos clubes. En el Celta no están descontentos con el rendimiento de los tres futbolistas, pero sus altas opciones de compra así como su inasumibles fichas, hacen casi imposible acometer estas operaciones y darles encaje en la economía celeste.
El último en llegar, Wesley Hoedt, es el que tiene menos opciones de seguir. Su rendimiento, sin ser malo, no ha elevado el nivel del eje de la zaga. El Celta ya ha tenido que soportar una alta ficha para convencerlo este mes de enero y ahora debería hacer frente a una opción de compra no inferior a los 15 millones de euros.
El Southampton pagó al Lazio, por el internacional holandés, 16 millones de euros. Hoedt comenzó el curso siendo titular hasta la llegada del austriaco Ralph Hasenhuttl para sustituir a Mark Hughes. El Celta no va a acercarse a las cantidades que demanda el Southampton por lo que su continuidad está descartada.
En el caso de Sofiane Boufal, el rendimiento del franco marroquí, de menos a más en el curso sí le habría valido para ganarse otra temporada en Vigo. Pero al igual que Hoedt, el Southampton exige una cantidad elevadísima por el extremo, unos 17 millones de euros.
Sólo una rebaja muy importante de esta cantidad, unida a una considerable reducción de la ficha que percibe Boufal por temporada, encajarían en la economía celeste. El problema, a diferencia de Hoedt, es que Boufal no contaba para Mark Hughes pero el nuevo entrenador, Hasenhuttl lo quiere seguir durante la pretemporada.
Con Boudebouz las cantidades sí son más asumibles para el Celta, la opción de compra por parte del Betis es de ocho millones de euros, pero su ficha, de tres millones, lo colocaría a la altura de los mejor pagados de la plantilla, una situación que no se baraja en A Sede del Celta.
Su edad, 29 años, iría en contra de la política de fichajes del Celta. Su rendimiento, sin ser malo, tampoco alcanza el notable y el club solo barajaría continuar con él si las condiciones económicas, tanto de compra como de ficha, bajasen de forma importante.
De esta manera, solo Olaza, de 24 años y con una opción de compra de cinco millones, encaja en la política de fichajes del Celta, tanto en edad como en parámetros económicos. El uruguayo es el único con opciones de formar parte de la plantilla para la temporada 2019/20; Boudebouz, Boufal y Hoedt, salvo sorpresa mayúscula, volverán a sus clubes de origen.