El celtismo responde a la llamada de auxilio

El Celta de Vigo se encuentra en una grave crisis deportiva. A falta de diez jornadas para que finalice la competición en LaLiga Santander, los celestes ocupan plazas de descenso a Segunda. Por ello, para el vital encuentro ante el Villarreal de la fecha que sigue al parón liguero, el club ha hecho un llamamiento a la afición con una gran oferta de entradas para llenar Balaídos. Y el celtismo ha respondido.

Una llamada de auxilio. Así se puede calificar la oferta de localidades e invitaciones que ha preparado la entidad viguesa para fletar las gradas del estadio celeste de cara a la importante cita frente al submarino amarillo, uno de los rivales directos por la permanencia. La afición ha dado el callo y desde primera hora de la mañana de este miércoles se han formado largas colas en los aledaños de Balaídos para hacerse con una de las entradas a precio de ganga o con alguna de los convites disponibles para abonados.

Los seguidores celestes no abandonan la esperanza de la permanencia y, conscientes de la relevancia del partido ante el Villarreal en el que tanto habrá en juego, quieren acompañar a su equipo y convertirse en el jugador número 12. Un Balaídos lleno será uno de los mejores empujes para que la escuadra dirigida por Fran Escribá busque los más que necesarios -casi obligatorios- tres puntos.