"Le di un abrazo muy fuerte a todos los chavales. Estamos vivos"

Más allá del resultado, una derrota inmerecida ante un Getafe beneficiado por las decisiones arbitrales de González Fuertes, Miguel Cardoso quiso analizar el partido de los jugadores del Celta. El técnico luso resumió la actuación con "hoy di un abrazo fuerte a los chavales. Estamos vivos, muy vivos y vamos a pelear cada minuto", mostrándose orgulloso del encuentro que realizaron en el Alfonso Pérez.

"Tengo un vestuario que trabaja mucho cada día y que ha pasado un conjunto de adversidades", comenzó Cardoso. "Tuvimos lesiones, un mes de enero que nos hizo daño", en referencia a la ausencia de Aspas y a los rumores de un mercado que volvió loco a parte de la plantilla. "Hoy teníamos capaz de jugar aquí, mismo con diez hasta el final", como punto y seguido a todo lo malo que le ha tocado vivir al Celta estas últimas semanas.

"Teníamos fútbol para salir de aquí con un resultado diferente, empezamos la segunda mitad y tuvimos oportunidad de marcar", recordó. "Mismo con el 2-1 tuvimos oportunidad", reiteró Cardoso que reconoció que el tercer tanto ya hizo "imposible" pensar en remontar.

La frustración se sentirse claramente perjudicado por el árbitro debe, "como dijo Iago, transformarse en energía positiva", continuó Cardoso. "Hay que mirar adelante y vamos para adelante con todo", aseguró.

Cardoso se mostró seguro del compromiso de sus jugadores de aquí a final de temporada: "Tenemos un vestuario con energía muy fuerte. Es un equipo unido y que siempre reaccionó. Estamos vivos, muy vivos y vamos a pelear cada minuto".

Por último, a pesar de regresar de vacío a Vigo, el luso quiso rescatar que "lo importante es que teníamos el plan claro para este partido. Lo probamos y durante todo el tiempo estábamos adentro" lo que dio al equipo, incluso con un hombre menos opciones de marcar goles para adelantarse 1-2 o lograr el empate a dos tantos.