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Es Noticia

José Enrique se recupera de un tumor

José Enrique disputa un balón con Julio Baptista en su etapa como celeste.
ElDesmarque

José Enrique colgó las botas en 2017 tras una larga carrera entre LaLiga Santander y la Premier League. Fue en el Celta donde empezó a darse a conocer, con 14 partidos como celeste en Primera. No obstante, el choque más importante de su vida lo ha tenido que disputar lejos de los terrenos de juego, ya que un cordoma le acecha desde mediados del mes de mayo.

"Nos encontrábamos reunidos con Chris Hughton, entrenador del Brighton al que tuve en mi etapa en el Newcastle. Aquella noche ya me empezaba a molestar la luz. Llegué al hotel y pensé que eran migrañas. Durante la noche tuve un dolor de cabeza brutal y a la mañana siguiente empecé a ver borroso. Después empecé a ver doble. Tenía los ojos abiertos y veía doble. Tuve que ir a Urgencias y, tras nueve horas allí me hacen un TAC. Me ven neurólogos La prueba indicó que tenía una vena en la cabeza que estaba colapsada. Me mandaron al hospital St. George's de Londres de inmediato, especializado en neurología. Paso allí dos noches", así relataba José Enrique a MARCA el momento en el que comenzó todo.

Un cardoma se puede entender como un tumor poco frecuente y difícil de tratar, ya que se encuentran cerca de la médula espinal u otras estructuras fundamentales, como la arteria carótida y el tejido cerebral. Tras varios días en los que incluso se especulaba que el futbolista podría perder el ojo, un neurocirujano le informó de lo que realmente tenía: "Por eso ahora llevo un parche", decía.

Pese a que la recuperación no ha hecho más que empezar, José Enrique ya se encuentra en casa y parece haber aprendido de la experiencia: "Todo esto hace que valores más la vida. Los futbolistas viven en una burbuja, es una vida irreal. Te pierdes y te crees que eres invencible. Cuando juegas al fútbol la cabeza no te la chequean", señala.

Ahora, ha de cumplir una serie de pautas que, poco a poco, le devolverán a la vida normal, aunque de momento "no puedo levantar peso, no me puedo agachar, tengo la cama adaptada para dormir en una posición de 30 grados para que no me suba la presión sanguínea de la cabeza...".

Su agradecimiento por el apoyo

El próximo 26 de julio, José Enrique comenzará con la radioterapia, un proceso en el que necesitará del apoyo de sus seres queridos, a quienes ha querido agradecer todo lo que están haciendo por él: "A mi novia, a mis padres y a mis hermanos... También al doctor Simal, a su equipo y al hospital La Fe", concluía el exfutbolista valenciano.

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