Empate agridulce que pudo ser algo más
Un punto para el Cádiz CF en su visita al Getafe CF. Portería a cero y la sensación de que pudo sacar algo más, aunque en el tramo final la ocasión más clara la tuvieron los locales. Faltó algo de capacidad de desequilibrio para aspirar a la victoria, pero al menos se reconduce la situación tras la goleada en Vallecas.
El Cádiz comenzó el partido con una imagen muy diferente a la de su última salida, la de Vallecas. El equipo sabía qué hacer con el balón y tenía intensidad para llegar al área rival. Se imponía en los duelos directos y llevaba la iniciativa, aunque sin ocasiones claras. Tuvo un remate de cabeza Rubén Sobrino en una acción que no quedó clara si estaba en fuera de juego.
Con el paso de los minutos fueron los locales los que fueron imponiendo algo su juego, pero el Cádiz estaba bien puesto y no dejaba al equipo de Quique Sánchez Flores que llegara con peligro. La primera aproximación del Getafe fue a los 24 minutos tras un centro de Portu.
Tras un buen inicio, el equipo se fue diluyendo. Es verdad que estaba compitiendo bien, pero con el balón no era capaz de poner en apuros a su oponente. Las llegadas en los últimos minutos del primer tiempo eran de un Getafe que había ido de menos a más, al revés de lo que sucedía con los amarillos.
Era una primera parte marcada por los contratiempos. Chust tuvo que pedir el cambio por una lesión y Fali también estaba con problemas. El partido estaba extraño y Álex Fernández rozó el gol con un remate acrobático al filo del descanso.
Todo estaba muy igualado en el arranque de la segunda mitad. Cala había tenido que entrar por Fali, lesionado, y el Cádiz había tenido que hacer dos cambios obligado por las circunstancias. Lozano creó peligro tras un robo en el minuto 53, pero no llegó a rematar a portería.
Cuando quedaban unos 20 minutos, el partido estaba donde quería el Cádiz. No estaba sufriendo en defensa y merodeaba el área de David Soria con cierta frecuencia. Sergio quitaba a los extremos titulares en una decisión difícil de entender en el caso de Ocampo, que estaba muy entonado.
Sobrino tuvo una gran ocasión en el minuto 70, pero su disparo cercano lo rechazó Soria como pudo. El partido se podía ganar, pero el Getafe también mostraba los dientes sacando a Munir. Estaba todo muy igualado y con un poco de acierto se podía aspirar a sacar los tres puntos, pero no había inspiración.
David Soria evitó el tanto en un gran disparo de Lucas Pérez, que acababa de entrar al campo. Daban seis minutos de alargue y todo estaba por decidir. El punto no era malo del todo, pero era una buena ocasión para dar un salto en la tabla. Al final tuvo que dar las gracias por el punto porque Enes Unal mandó el balón al palo en la jugada final.