El nuevo rol de un fijo de Cervera: un protagonismo que va a menos

La plantilla del Cádiz CF cuenta con dos jugadores que recuerdan de dónde viene este equipo. Jon Ander Garrido y Salvi saben lo que se sufre defendiendo este escudo en Segunda B y ahora disfrutan de la estabilidad en LaLiga Santander. En el caso del jugador norteño, su protagonismo ha ido descendiendo con el paso de las temporadas.

Es uno de los futbolistas más queridos y respetados en el vestuarios y sus compañeros saben lo mal que lo pasó la pasada temporada. El año del ascenso a la máxima categoría fue el de los problemas físicos de Garrido, que llegó a plantearse la retirada, según confesó.

El bilbaíno se ganó a Álvaro Cervera después de estar cedido media temporada en el Racing de Ferrol. Con el equipo ya en LaLiga SmartBank se convirtió en un jugador muy importante para el técnico y en la temporada 2016/17 disputó 2.180 minutos.

La siguiente fue la de su explosión definitiva y llegó a los 2.963 minutos. Formó una pareja ideal con José Mari para darle consistencia al centro del campo del club amarillo. Era el jugador perfecto para garantizar esas recuperaciones que necesitaba Cervera para salir a la contra con velocidad.

Por unas circunstancias o por otras, Garrido ha ido perdiendo ese peso en el equipo. Los problemas físicos hicieron que en la campaña 2018/19 bajara a los 1.847 minutos y que en la pasada se quedara en 1.796.

En la actual se ha aumentado la competitividad en el centro del campo y la llegada de Jens Jonsson le ha cortado el paso al jugador vasco, que se ha quedado en 762 minutos hasta el momento. Llegó a debutar en LaLiga Santander en San Mamés en un partido donde los amarillos ganaron con nueve jugadores sobre el campo.

Garrido tiene contrato hasta 2023. La intención del club es reforzar la medular y habrá que ver su nuevo rol en la plantilla. Durante la pretemporada se conocerán las posturas del jugador y del propio Cádiz en este sentido.