Esto que se solicita desde el consistorio no vendría más que a ralentizarlo todo, ya que la convocatoria de junta extraordinaria hay que llevarla a cabo con varios días de antelación. Si se siguen mostrando inflexibles tanto los administradores concursales como el propio Ayuntamiento, será imposible comenzar la pretemporada el próximo lunes, y mucho menos planificar la pretemporada.
La situación deja en el tejado de los nuevos accionistas la posible solución. Sobre el papel sólo hay una: que adelanten la liquidez necesaria a las arcas del club hasta que se cumplan los plazos. Pero esta tampoco parece que vaya a ser la vía que se adopte. La incertidumbre vuelve a inundar al club.