Párala otra vez, Jan

Jan Oblak lo volvió a hacer. En un partido en el que apenas había trabajado y en el que si hubiera jugado Werner quizás nadie se habría dado cuenta, el portero del Atlético de Madrid volvió a convertirse en héroe de forma casi inesperada en la ocasión más clara del Getafe, en el tramo final del encuentro.

Fue de penalti, una faceta en la que Oblak tiene una extraña fama. Parece que le persigue aquella tanda de Milán, pero lo cierto es que el porcentaje de aciertos del esloveno desde los 11 metros es de un 58 por ciento. Dicho de otro modo: Oblak ha parado siete de los 12 penaltis que le han lanzado en el Atlético.
Sin ir más lejos, el Atlético ha sufrido cuatro penaltis en contra durante la presente campaña, pero sólo ha encajado un gol. Paró un penalti a Jonathan Viera en Gran Canaria, otro a Aduriz en San Mamés y este sábado ha vuelto a hacer lo mismo ante Fajr en el Coliseum. Sólo Willian José, en el Metropolitano, ha sido capaz de batirle esta temporada.