José María Arrate, los test, la final de Copa y Aduriz
José María Arrate presidió el Athletic Club entre 1994 y 2001, una época que será recordada por la clasificación para la Champions League con Luis Fernández al frente del banquillo. El empresario vinatero se mantiene alejado de los focos, pero sigue pegado a la actualidad del club rojiblanco, que, como el resto del fútbol, vive con inquietud la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.
En una entrevista a Deportes Cope Bilbao, Arrate se 'mojó sobre la polémica por los test del COVID-19 que LaLiga Santander pretende realizar a todos los jugadores antes del regreso del fútbol; una medida que se ha encontrado con el freno de Sanidad.
"El fútbol es muy importante, hay otras cosas que son muy prioritarias, como son los test que tienen que hacerse al mundo de la sanidad, que son los que nos van a sacar las castañas del fuego cuando tengamos un problema de salud", dijo.
Al expresidente le parece "un verdadero desastre" que no se haya hecho test a todo el mundo que se dedica a la sanidad. "Me parece perfecto que a los futbolistas se les haga uno, dos o tres controles. Pero es una barbaridad que los que están en primera fila no hayan tenido ya los test para que sepan cuál es su situación y nos puedan seguir ayudando".
Por ello, lanzó un mensaje contundente. "Primero, los sanitarios, y después, todos los demás".
La final de Copa
Arrate también se refirió al aplazamiento de la final de Copa entre el Athletic Club y la Real Sociedad y convino que este histórico derbi debe retrasarse todo lo necesario para que se pueda disputar en “condiciones” y con público. En este sentido, apuntó que resultaría "lamentable y un desastre" que una final como esa se jugase a puerta cerrada.
"No sabemos si alguna vez podremos volver a vivir algo semejante y no poder disfrutar de ello sería una auténtica pena", apuntó el expresidente rojiblanco, que confió en que Aritz Aduriz pueda estar presente en esa final en 2021.
"Quiero que juegue y que marque un gol", aseveró Arrate, quien sin embargo, no se atrevió a aconsejar a Aitor Elizegi qué fórmula utilizar para que el ariete guipuzcoano, que finaliza contrato el próximo 30 de junio, pueda seguir en activo hasta entonces.
El expresidente del Athletic Club consideró un "mal menor" que las competiciones vayan a reanudarse a puerta cerrada. A su juicio es la mejor fórmula posible para salvar la economía futbolística y garantizar la supervivencia de los clubes. “No cabe duda de que el fútbol sin aficionados en los campos resultará muy descafeinado pero hay que ir dando pasos".