La accesibilidad es uno de los puntos elogiados en el dossier, que también alaba los espacios del recinto para los espectadores, así como los vestuarios y las dependencias médicas y para controles de dopaje. En el lado negativo se indica que no se han facilitado planes de evacuación; que solo cumple parcialmente los requisitos relativos a prensa y radiodifusión, por el tamaño de algunas posiciones, y que los espacios propuestos para las fan zone no son satisfactorios. También se cuestionan aspectos en materia de movilidad, como la conexión de Bilbao con los aeropuertos de Loiu y Vitoria, así como la capacidad hotelera de Bilbao, que solo cumple una parte limitada de las exigencias de la UEFA.