Al entrenador argentino se le ha preguntado qué le ha faltado a su escuadra para no poder con otro de los recien ascendidos de la categoría. Según Bielsa "el equipo ha defendido bien, dispuso de la pelota cada vez que la perdió, en líneas generales no sufrió y en ataque tuvimos infinidad de pelotas de ataque. En el primer tiempo generamos tres ocasiones de gol claras, pero insuficientes para 45 minutos de posesión casi exclusiva".
En la reanudación lógicamente entraba en liza el paso de los minutos: "En los segundos 45 tambien igual de posesión, pero el equipo fue ansioso y precipitado. En los dos tiempos nos faltaron que esos ataques tuvieran un punto más de creatividad, de profundidad. Crecíamos bien por los costados pero los centros no se encontraron con el destinatario y en el juego central había muchos rivales y no le conseguimos dar profundidad".
El Granada ha hecho su partido, a la griega, y se ha llevado la victoria con algún encontronazo incluso entre banquillos debido a un balón no devuelto tras caer fundido el enésimo jugador visitante: "Entiendo que correspondía devolver el balón y también interpreto los impulsos de los jugadores del Athletic, porque si bien el rival no hizo nada que no fuera legitimo y es el árbitro quien tiene que evaluar lo reglamentario, evidentemente había un clima especulativo que hace que un futbolista confunda y no resuelva dentro de un margen de deportividad. Justifico ese comportamiento porque en el curso del partido, sin que signifique un reproche, había un clima enrarecido por este tipo de acciones", ha denunciado el 'Loco' en la sala de prensa.