El plátano es la fuente de potasio por excelencia. Su bajo contenido en proteínas y lípidos, y su gran concentración de hidratos de carbono lo convierten en una fruta muy ligada al deporte, pero entre sus consumidores, hay dos grupos claros: los que se comen las hebras del plátano y los que las quitan.
¿Es mejor quitarlas o comerlas? Esta es la pregunta que muchas personas se hacen y que, a raíz de un vídeo de un mono pelando un plátano, la enfermera Esther Gómez, más conocida como @mienfermerafavorita, resuelve en sus redes sociales.
"Se llaman fibras del floema y son una parte del sistema vascular del plátano: las 'autopistas' que transportan nutrientes desde la planta hasta el fruto", comienza explicando la profesional en un post de Instagram.
Asimismo, "sirven como indicador del estado de maduración del plátano" por lo que, cuando estos hilos están tensos, significa que la fruta está poco madura y "los nutrientes aún no se han repartido de forma uniforme en la pulpa". Si por el contrario, "los hilos se desprenden con facilidad", esto significa que "el plátano ya está en su punto", añade la misma.
Uno de los motivos por los que algunas personas quitan las hebras del plátano antes de comérselo es porque son "más fibrosas y no tan dulces como la pulpa". Sin embargo, aportan nutrientes como:
Teniendo en cuenta que las hebras del plátano son una parte más del plátano y que aportan nutrientes, lo mejor es comerlas ya que "son un extra de fibra y nutrientes que apoyan la digestión y complementan la pulpa". No obstante, si te molestan, "no pasa nada si las quitas, porque el plátano seguirá aportando sus beneficios principales".