Ojo al interior del nuevo MG4: ahora es casi un premium

La transformación de MG en Europa no deja de sorprender. Lo que comenzó como una apuesta económica dentro del segmento eléctrico, ha evolucionado hacia una propuesta mucho más refinada. El nuevo MG4 ya no es solo un coche funcional. Ahora también quiere impresionar.

Lo primero que salta a la vista es su nuevo diseño exterior. El modelo gana en elegancia, con formas más fluidas, menos agresivas y claramente pensadas para encajar mejor en el mercado europeo. En la parte trasera, el gran piloto LED continuo y un alerón rediseñado aportan un toque distintivo. La imagen ya no es la de un utilitario chino, sino la de un compacto con ambición.

MG prepara una revolución en su compacto

Sin embargo, es en el interior donde se nota el salto más importante. El MG4 estrena una cabina más cuidada, con materiales mejor rematados y un diseño que se acerca al estándar de los modelos premium generalistas. El nuevo sistema multimedia, con una pantalla de 15,6 pulgadas, domina un salpicadero limpio y funcional. Todo está enfocado a ofrecer una experiencia moderna.

La conectividad es otro de los puntos fuertes. La colaboración con Oppo ha permitido integrar nuevas funciones inteligentes, gestionadas por IA. Entre ellas, destaca la conectividad inalámbrica, un cargador sin cables, cámaras en 360 grados y un completo paquete de asistentes a la conducción.

No renunciará a una de sus mayores virtudes: las prestaciones

El MG4 no olvida sus raíces eléctricas. Se mueve gracias a un motor trasero con 163 CV, alimentado por una batería que permite recorrer hasta 530 km, según ciclo CLTC. Además, la marca trabaja ya en incorporar una batería semisólida, tecnología aún poco habitual.

A pesar de la mejora tecnológica y estética, MG promete mantener sus precios. El objetivo es claro: ser una opción atractiva, equipada y asequible dentro del mercado eléctrico.