El Real Madrid perdió el pasado verano al que había sido uno de sus jugadores más importantes durante las tres últimas temporadas, Dzanan Musa. El alero bosnio firmó con el Dubái Basketball para vivir la primera temporada en la Euroliga del conjunto de los Emiratos Árabes y ahora ha recordado su salida de la capital de España en una charla con As.
Ganador de 2 Liga Endesa, 2 Copas del Rey, 2 Supercopas de España y 1 Euroliga con la camiseta blanca, el atleta reconoce durante la entrevista que continuar en Madrid fue su primera opción durante todo el año pasado. "Todo fue una cuestión de contratos", desliza para apartar cualquier polémica.
Y es que si echamos la vista atrás, sus declaraciones nada más ganar el campeonato doméstico no dejaron indiferente a nadie: "Yo quería estar aquí muchos años, pero no hemos tenido buena relación a la hora de negociar un nuevo contrato. Estoy triste, pero madridista siempre”.
Ahora, en lugar de echar más leña al fuego, no hace otra cosa que deshacerse en elogios con la que fue su casa y su presidente. "Me quedo con el amor hacia el Real Madrid, hacia los que eran mis compañeros y hacia Florentino Pérez. Es un tío increíble con los jugadores, estábamos muy felices trabajando para él", pronuncia.
El Real Madrid seguirá siendo su "familia", dice, pero en Dubái, además de un contrato "muy bueno", encontró un proyecto que le convenció. Tanto a él como a su familia. Y la seguridad es tal que se atreve a asegurar que estarán en una final four "en los próximos tres años".
No será fácil, eso seguro. Este año, con la entrada de Dubái BC y Hapoel Tel Aviv, el calendario es más exigente que nunca. No solo por los cuatro encuentros extra, sino también por los desplazamientos. Ni más ni menos que las horas equivalentes a 22 días se pasará volando Musa junto a Sus compañeros. "Es parte de nuestro trabajo", se resigna el nacido en Bihac.