El Manresa quiere romper su mala racha como local

El ICL Manresa recibe este domingo (19.00 horas) al Herbalife Gran Canaria, con el objetivo de acabar con su mala racha en el Nou Congost, donde ha perdido sus tres últimos partidos.La principal dificultad para los hombres de Ibon Navarro será llegar frescos a la cita, pues hasta seis jugadores han tenido problemas físicos durante la semana.
Así serán duda hasta última hora Román Montañez y Àlex Barrera, y también arrastran diversas molestias Álex Herández, Dimitry Flis, Dejan Musli y Marius Grigonis, aunque estos cuatro últimos jugarán.
Ante este panorama, Navarro no esconde su preocupación. "Las lesiones son parte del juego, a todo el mundo le toca en algún momento, pero para este partido es importante tener a la gente con chispa", se ha lamentado.
El entrenador del conjunto manresano explica que el equipo ha llegado a ese momento de la temporada en que se empieza a notar el desgaste físico: "Muchos jugadores no están acostumbrados a llevar esta carga. Pensábamos llegar al parón de la Copa un poco justos, pero nos hemos quedado un poco cortos".
Aún así, Navarro se ha mostrado esperanzado en que, para mañana lo suyos, arropados por su público, hayan recuperado un poco de chispa ante un rival, que el técnico de Manresa define como "un equipo físico, espectacular, tanto dentro como en la línea exterior".
"Lo más peligroso que tienen son sus cambios de ritmo ofensivos, a los que es muy difícil responder porque son jugadores muy inteligentes, con mucha experiencia y mucho talento. Por eso, lo más importante para competir con ellos es igualar la energía", ha añadido.
El partido será especial para el técnico del ICL Manresa ya que será el número 50 que dirija en la ACB. También servirá para que el base del Gran Canaria Albert Oliver se reencuentre una vez más con la pista en la que mandó durante cuatro temporadas.