Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada (recopilan datos sobre tus gustos y perfil).

Si continúas navegando por el sitio, estás aceptando su uso.

Puedes rechazar la utilización de cookies u obtener más información al respecto en nuestra Política de Cookies

A través de cualquiera de las páginas webs del Grupo tiene la opción de personalizar las cookies tal y como desee.

Es Noticia

Aprovechemos a Guitián para cuidar a Salisu

Sergio González fue rotundo el pasado 16 de julio. El entrenador del Real Valladolid confirmó que Mohamed Salisu era jugador de la dinámica del primer equipo. El barcelonés no dudó en asegurar un puesto en la organización de la primera plantilla al futbolista ghanés.

Hasta ahí, todo claro. El Pucela 'fichaba' un central para el primer equipo en un momento en el que era el tercero del equipo, sólo por detrás de Kiko Olivas y Fernando Calero. Semanas más tarde llegó Joaquín Fernández y, pocas horas después de aquello, se quedó Alberto Guitián, al que no se le consiguió dar salida.

Posible cambio

Con todo se produce un pequeño overbooking en el eje de la zaga que puede y, quizás, debe, cambiar la situación del central ghanés. Haciendo mías algunas declaraciones de Miguel Ángel Gómez y Miguel Rivera, creo que el puesto de cuarto central en el Real Valladolid no debe ser pasar Salisu. ¡Nunca!

Teniendo en la plantilla a Alberto Guitián, el Real Valladolid debe, como dijo Rivera el pasado mes de marzo, tener paciencia con el jugador. La mejor paciencia posible está dentro del Real Valladolid Promesas.

Alberto Guitián y Mohamed Salisu, con el Real Valladolid.

Dentro del repaso sobre la filosofía de cantera que Miguel Ángel Gómez hizo en mayo, el andaluz aseguró que al primer equipo se llega "derrumbando la puerta" y Salisu aún no lo ha hecho. No lo ha hecho, principalmente, porque no ha tenido tiempo.

Confirmado que el ritmo y la experiencia que puede adquirir en el día a día del equipo es mayor que con un conjunto de Segunda división B, la presencia de un jugador de sus características y edad en el primer equipo durante la semana y en el filial en los partidos puede limitar su rendimiento en el equipo de Rivera y éste es, al fin y al cabo, el que dictaminará su futuro.

Como bien decía Braulio Vázquez, "en el fútbol profesional no hay ni buenos ni malos jugadores sino buenos y malos rendimientos". A esta sensación hay que añadir que los jóvenes aún deben trabajar para llegar a profesionales y Salisu todavía debe hacerlo. Tiene que seguir creciendo y no como cuarto central. Ese es un puesto para Alberto Guitián, un gran central, por otra parte.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar