El colegiado, conocido popularmente como 'El Gomina' por razones obvias, se llevó alguna que otra crítica extra por parte de algunos malaguistas después del partido. Muñiz disfrutó de los encantos de la noche malagueña y estuvo de juerga hasta altas horas de la madrugada. Tuvo que escuchar algún cántico clásico como "¡Qué malo eres, Muñiz, qué malo eres!".
Además, adjuntamos una fotografía que nos envió un testigo de excepción, Josemi Ruiz Cortezo.