Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros con fines analíticos y para mostrarte publicidad personalizada (recopilan datos sobre tus gustos y perfil).

Si continúas navegando por el sitio, estás aceptando su uso.

Puedes rechazar la utilización de cookies u obtener más información al respecto en nuestra Política de Cookies

A través de cualquiera de las páginas webs del Grupo tiene la opción de personalizar las cookies tal y como desee.

Es Noticia

Soy del Sporting


Pocas cosas me acercan más a mi casa que escuchar Ser Gijón todos los días. No importa la ciudad en la que me encuentre. Gracias a la aplicación para Iphone puedo escuchar a Paloma Llanos, Pablo Canga y David González como si estuviera en El Naútico. Me gusta escucharla y me gusta sentirme uno más, por lo que disfruto mucho cuando opino en El Escáner. Paloma, Pablo y David forman parte de mi vida, me informan, me acompañan, me divierten... La magia de la radio, lo llaman.
Opinar es lo más fácil del periodismo. Todo el mundo tiene una opinión y se piensa que es tan válida como la del resto. Y ahí está el problema. Para ser opinador hay que tener información, talento y si me apuran, hasta una cierta experiencia.  No me considero opinador, por eso sólo opino cuando me lo piden.
Cuando hablas por la radio hay veces que el directo te hace decir lo primero que piensas, no hay tiempo para la pausa y la reflexión. Aprovecho esta columna que me brinda Andrés Maese en su Desmarque para puntualizar una cosa que puede resultar impopular.
Soy del Sporting, pero no por encima de todas las cosas. Me explico. Soy de los que piensa que el club no está por encima de todo. Yo soy de las personas. Soy del Sporting porque soy de Gijón, pero también soy del Sporting por Quini, por Ferrero, por Joaquín, por Jorge David, por Preciado, por Bilic, por Cases... No soy de un club por el club, eso no me llena. Soy del club por la gente que lo ha hecho grande y por los que trabajan día a día para que yo, un Don nadie, disfrute.
Me niego a decir eso de "daría mi vida por el Sporting". Evidentemente no. Soy del Sporting porque me alegro cuando gana y sobre todo porque me entristezco cuando pierde. Punto. Hasta ahí. Nada me gusta más que ver un partido de mi equipo, hablar de los posibles fichajes en verano y soñar con gestas imposibles en rojiblanco. Pero no todo vale. ¿Firmarías que el Sporting subiera a cambio de despedir al médico, al taquillero, a Stefan y a Sandoval?. Pues miren, no. Quiero que el Sporting suba, pero no a cualquier precio. De hecho, no me importa que estemos en Segunda. Me gustaría estar en Primera, y pelear la copa, y meternos en Champions.... Pero lo que realmente me importa es que mi equipo juegue mal (desde que tengo uso de razón no recuerdo verles jugar bien), no cuide el producto de casa y parezca que los forofos tienen más voz que los aficionados. La culpa no es sólo del entrenador. La culpa es de un sistema y una forma de entender el juego que está machacando al fútbol español. La culpa es de unos jugadores que no dan el nivel y parece que no les importa. La culpa, por supuesto, radica parcialmente en un entrenador que no da con la tecla. Pero no se puede tirar por la calle del medio. Si la directiva del Sporting creía hace justo un año que Sandoval era el entrenador adecuado hasta Junio de 2015 no veo motivos para cambiar de opinión. Se hizo un daño terrible a la entidad echando a Manolo. Los que apostamos por el SEÑOR Sánchez Murias hasta en los peores momentos defendemos ahora al entrenador actual. Siendo casos distintos, en ambas situaciones las prisas ejercen de brazo ejecutor. Sandoval es un entrenador muy preparado. Si no sube con el Sporting habrá fracasado, pero también lo habrá hecho el Sporting por no lograr el ascenso con uno de los mejores entrenadores de la categoría. No creo que un despido arregle la situación deportiva y no me avergüenza decirlo.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar