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¡Que se acabe este suplicio!

Luis Urrutia

Un partido de fútbol es, para la mayoría de los mortales, un espectáculo. El color verde del césped, la luz del estadio, la liturgia de cada día: la cerveza (dentro del campo sin alcohol), la discusión sobre la alineación, el abrazo en cada gol, la mirada al suelo en las derrotas. Una gozada, pero no para todos.

Vamos a ver el partido desde varios puntos de vista:
El árbitro: Es un atleta, pero habitualmente no comprende el juego del fútbol. Conoce las reglas, pero no las interioridades.
El delantero solitario. De vez en cuando, cada vez más a menudo, a los entrenadores se les ocurre que la mayoría del equipo debe dedicarse a labores destructivas mientras que encomienda la tarea de ataque a un único elemento. Alto, fuerte, de juego aéreo potente. Suele dedicar el partido a luchar contra los centrales del conjunto rival. Físicamente parecidos a él. Todos buscan el contacto físico. Acaban agotados. Este delantero sabe que tendrá pocas opciones de marcar un gol y muchas de acabar sangrando. Vive el partido deseando que acabe.
El entrenador que gana sin merecerlo. Estas cosas, de tanto en tanto, ocurren. El equipo que peor juega, se adelanta en el marcador. Suele ocurrir en escenarios grandiosos. Y provoca la reacción enfurecida del rival, que provoca taquicardias en cada llegada al área. En ocasiones, se consigue el propósito, pero en todos los casos, desean que el partido acabe cuanto antes mejor.
El árbitro. Para este, no hay caso. En cuanto empieza el partido, desea que termine ya. Es un atleta, pero habitualmente no comprende el juego del fútbol. Conoce las reglas, pero no las interioridades. Si acierta, es lo normal. Si falla, se convierte en verdugo. Siempre está en el centro de la diana de las iras de todos. Todo árbitro que se precie, en cuanto da inicio a un partido, pide a gritos que se acabe este suplicio.
Luis Urrutia
Director de La Taula de 11TV

Hay partidos en los que el delantero desea que el suplicio de estar solo peleando se acabe cuanto antes. (Foto: Alberto Iranzo)

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