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La final del Cuatro y Medio, por fin, calienta motores. Después de seis días "sin hacer nada", Aimar Olaizola ha acudido este lunes al frontón Bizkaia para testar el estado de su mano izquierda y las sensaciones de goizuetarra ha sido positivas. Ha sido cerca de hora y media de peloteo en el recinto de Miribilla tras el cual Olaizola II ha desvelado que se encuentra "bastante mejor y sin miedo" al golpear la pelota. "Necesitaba más tiempo para quitar el miedo para meterme la pelota con más confianza. Hoy le metia mejor, he estado sin miedo y espero estar bastante bien para la final. La semana pasada estaba mejorando, pero andaba justo de tiempo y por eso decidí que si no había aplazamiento no podía jugar. Desde el martes han pasado seis días desde martes, no he tocado pelota y estoy con más confianza y menos miedo. Eso es lo importante", ha subrayado.
Más dudas tiene el tetracampeón de la 'jaula' sobre su estado físico y anímico, ya que ha confesado que incluso le ha costado conciliar el sueño después de una semana movida. "Tengo que intentar pensar solo en el partido y centrarme bien. En una final la cabeza influye mucho y con todo lo que ha pasado no será fácil. Mi ilusión es ganar esa txapela. Desde el martes no he hecho nada y partir de ahora haré los entrenamientos como siempre e intentaré descansar, que no he dormido mucho", ha explicado.
Mañana, martes, a mediodía será el turno de Juan Martínez de Irujo. El de Ibero se ejercitará en el Bizkaia por última vez antes de verse las caras con Olaizola II el jueves a partir de las 12.00 horas en el apartado de material.
