No son ganas de aguar la fiesta, Ainara, pero hay que ser realistas. La ambición, la ilusión, las ganas de ganar de este equipo no tienen límites, pero el cuerpo humano sí y nuestros 'Men in Black' hace tiempo que tienen la luz de reserva encendida. Enfrente se van a encontrar con todo un 'Mihura' y además herido después del fiasco de la Euroliga. Hasta ahora, la bravura de Hervelle, Banic, Mavro y Mumbrú había disimulado las carencias en la pintura, pero ahora les va a tocar colisionar en la pintura con una rotación larga como la Cuaresma. N'Dong, Fran Vázquez, Lorbek, Perovic... Por no hablar de Navarro, Rubio, Lakovic, Ingles, Sada, Morris, Anderson, que vienen de merendarse al Caja Laboral sin despeinarse. Disfrutemos de lo que ha logrado este equipo, que ha sido mucho y todavía no lo hemos digerido, porque este Barça nos va a dar poca opción a la sorpresa. Ojalá me equivoque.Sí, sí, Iñaki. Estoy segura de que los de Katsikaris también acusaron el enorme desgaste ante el Madrid, pero la sed de victoria les permitió sacar fuerzas de donde no quedaban. Algo mágico. Como lo fue el efecto Muribilla. La clave estará en volverse con uno de los dos partidos del Palau en el bolsillo. Una vez superada la desventaja de cancha con la que parten en la final, nadie podrá parar a este equipo en el Bilbao Arena. A nadie se le escapa el impresionante potencial que tiene el Regal Barça, pero el equipo catalán también tiene muy presente el peligro de su rival. La posibilidad de hacer historia en la ACB se convertirá en una fuerza arrolladora que tratará de llevarse por delante a uno de los mejores equipos de Europa. Puede que a estos jugadores no se les vuelva a presentar una oportunidada así. O sí. Que se lo pregunten a Paco Vázquez. La gesta del Manresa es el espejo.
