Barbón avisa en un febrero "crítico": "No viviremos una Semana Santa como vivimos la Navidad"
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha comparecido este viernes para analizar la situación epidemiológica del coronavirus en la región. Se avecinan días complicados en plena tercera ola y el máximo dirigente asturiano ha avisado a la población con vistas a la próxima época de 'vacaciones' primaverales: la Semana Santa.
Barbón ha reconocido que "nos queda un mes de febrero que puede ser dramático". "Tenemos que evitar el colapso sanitario, ese es el reto, hay espacios que nos hacen más vulnerables a los contagios, los espacios cerrados y mal ventilados y si nos quitamos la mascarilla, más riesgo aún", ha añadido el presidente.
Asimismo, ha reiterado que "febrero será un mes crítico. Hay una incidencia aculumada a 14 días de 652 casos por cada 100.000 habitantes y a siete días de 308".
Es por ello por lo que en el Gobierno "nos preocupa mucho la entrada de la cepa británica. Estaríamos hablando ya del 40% de los contagios en la región. Y dentro de poco será la mayoritaria a nivel nacional".
Asturias mantendrá el cierre perimetral de la comunidad y Barbón ha hecho una advertencia clara con vistas a lo que viene: "Si queremos descender a niveles objetivos, necesitamos sacrificar la Semana Santa. No podemos vivir la Semana Santa como hemos vivido la Navidad".
"Si no queremos que haya una cuarta ola, lógicamente no queda otra que sacrificar la Semana Santa", ha insistido Barbón que ha adelantado que no se endurecerán las restricciones actuales por el momento: "Más allá de aquellas medidas más duras que ya aplican en la comarca de Avilés".
Con respecto a los cierres perimetrales ha aclarado que "no fueron tan eficaces como pensábamos en la segunda ola, que eran sin más cierres perimetrales". "La diferencia es que en esta tercera ola el cierre perimetral va acompañado de otras medidas como por ejemplo el cierre del interior de los locales hosteleros. Ahora está haciendo efectos en positivo".