Cuatro años desde la proeza de Villa

David Villa es una de esas leyendas del fútbol español que siguen dejando su estela en la historia. El delantero de Tuilla, Asturias, ha logrado alcanzar la estratosférica cifra de 400 goles anotados en su carrera como profesional, 31 de ellos con la elástica del Sporting de Gijón. Este domingo, se cumplen cuatro años desde que el ariete se convirtiera en el máximo goleador de la selección española en mundiales.

Así, durante el 3-0 ante Australia con el que España decía adiós al Mundial de Brasil 2014, Villa hizo historia -una vez más-. El asturiano anotó el primer gol español en el minuto 36. Juanfran llegó hasta la línea de fondo por la derecha y asistió a Villa, que anotó un tanto de leyenda con un certero taconazo que se fue directo al fondo de la red australiana.

Villa celebró su tanto número 59 con la Roja besando el escudo hasta nueve veces, una por cada tanto anotado en un Mundial, en los 12 partidos que había disputado hasta la fecha en estos campeonatos.

Además, Vicente del Bosque decidió sacar al ariete del campo antes de finalizar el partido, impidiéndole anotar su gol número 60 con la selección.

Un orgullo no sólo para Asturias sino para España entera. Un futbolista, leyenda viva del fútbol patrio, que ha marcado un antes y un después en la selección española. Superó a Raúl González siendo todavía joven y se alzó con el 'título' de máximo goleador del combinado español.

Ese fue el último encuentro de Villa con la selección antes de que Julen Lopetegui (ahora exseleccionador) le convocara en el mes de agosto del pasado 2017 para los partidos clasificatorios para el Mundial de Rusia ante Italia y Liechtenstein. Ante los azurri, Villa disputó apenas dos minutos que valieron para que el Santiago Bernabéu se viniera abajo en una ovación cerrada. Frente a Liechtenstein, sin embargo, no pudo estar ni en la bancada. El asturiano tuvo que abandonar la concentración por una elongación en el aductor.