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Duro correctivo en Sevilla para un mermado Benalmádena (7-0)

Una imagen de un partido.
ElDesmarque

Una jornada más, y ya van cinco, el Bádminton Benalmádena vuelve a sufrir una derrota, en esta ocasión en tierras de un rival histórico, el Rinconada sevillano, por 7-0. Si la temporada está siendo complicada, el encuentro de este sábado comenzaba con más contratiempos para los de Lucas Quirós. El técnico no ha podido contar aún con Ye Zhaoying y Nicklas Mathiasen, y tampoco lo pudo hacer en Sevilla con Sophie Endtz, Javier Sánchez y Rafael Gálvez por diversos motivos.

Ante estas baja, debutaban con la entidad costasoleña Andrés Martín y la canterana Candela Antequera. El madrileño formando pareja con Ainoa Cuervas cedían en el dobles mixtos ante el británico Easton y la capitana hispalense Laura Molina por un doble 21/10. Posteriormente el propio Martín junto a Alejandro Ramírez cedían igualmente por un doble 21/17 ante Easton y Flores, mientras que Laura Chillón y Ainoa Cuervas caían doblegadas ante las hermanas Molina por 21/11 y 21/8.

La dinámica negativa siguió con los individuales (2º), donde debutaba Candela Antequera ante la donostiarra Nerea Díaz, que si bien cedía claramente por 21/11 en la primera manga, puso en apuros a la experimentada jugadora cediendo, eso sí, por 21/18 en la segunda. En el individual masculino, poco pudo hacer Javier Vilaplana ante Juan Manuel Fernández que le endosaba un doble 21-6. En la última tanda debió sumar el equipo costasoleño, pero no es fácil rendir con un 5-0, y mal partido de Laura Chillón ante Marta Molina (21/16-21/12) y más ajustado Alejandro Ramírez ante el alicantino Olivares (22/20-21/13), aunque sellando un duro 7-0 en el marcador final.

Así lo vio Lucas Quirós: "Duro resultado, aunque fue reflejo de lo que se vio en la cancha. Llegamos plagados de bajas y con una plantilla con 6 jugadores por debajo de los 19 años, y eso ante un aspirante a jugar la final, y en su feudo, complica todo. Lo único positivo es que nos queda menos para medirnos en dos semanas al CB Alicante, colista como nosotros y encuentro vital para nuestro futuro. Así que más que nunca espero que todos nos pongamos las pilas y lleguemos a punto la próxima jornada".

Candela Antequera, debutante en el equipo mostraba su agridulce sensación “feliz por el debut en División de Honor, siempre busca una escalar peldaños y acercarse al primer equipo. No ha sido como hubiese deseado, pero lucharemos por revertir la situación". La realidad es que Alicante y Benalmádena siguen colistas con cero puntos en cinco jornadas y medirán sus fuerzas el próximo 16 de noviembre en Benalmádena, donde, una victoria sería un bálsamo para la entidad costasoleña.

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