Victoria para Webber, liderato del Mundial para Alonso

Sensacional victoria de Mark Webber en Mónaco, con Alonso en puestos de podio.

El australiano de Red Bull, Mark Webber, que partía desde la 'pole' tras la sanción de Michael Schumacher, el más rápido en las sesiones de calificación de ayer sábado, se hizo con la victoria en el Gran Premio de Mónaco convirtiéndose así en el sexto piloto distinto en ganar una de las seis carreras disputaras esta temporada, un hecho sin precedentes en la historia de la Fórmula 1.
Para lo que es habitual en Mónaco, el Gran Premio fue bastante tranquilo. Tan sólo un incidente de consideración, en plena salida, cuando Romain Grosjean, cuarto de la parrilla y en plena lucha por la posición con Fernando Alonso, se pegó demasiado a la izquierda, por donde rodaba Schumacher, y vio como su Lotus se quedaba cruzado en mitad de la pista, provocando un pequeño caos en la primera curva y teniendo que abandonar una carrera en la que tenía depositadas muchas esperanzas.
A partir de ahí, tranquilidad durante más de treinta vueltas. Webber, Rosberg, Hamilton y Alonso rodaban cómodamente, sin permitir ventajas excesivas, pero sin acercarse en demasía entre sí para evitar que el aire caliente que desprenden los coches que ruedan por delante contribuyera aún más a la degradación de los neumáticos, la gran preocupación en la mayoría de circuitos.
El primero en parar para cambiar neumáticos fue Rosberg, con el que se inició una cadena de pitstops en cabeza de carrera que dejó a Alonso como líder en solitario durante más de una vuelta. El asturiano aprovechó la situación para rodar a fondo logrando un tiempo valioso que, una vuelta después, y tras su paso por boxes, le permitió reincorporarse a la carrera justo por delante de Hamilton, ganando así un puesto más que ya no perdería en lo que quedaba de carrera.
Vettel, que apuró al máximo su parada, logró muy buenos tiempos que le permitieron recuperar varias posiciones. Tras su pitstop, se situó por delante de Hamilton, demostrando que los Red Bull empiezan a recuperar su nivel y que su estrategia de carrera fue, probablemente, la más acertada de todas.
La amenaza de lluvia fue constante durante el último tercio de la prueba. Incluso comenzaron a caer algunas gotas a poco más de ocho vueltas del final que sembraron de preocupación el muro desde el que los ingenieros coordinan las estrategias de carrera. Vergné, de Toro Rosso, fue el más osado, pasando por su box para calzar unos neumáticos intermedios que, en caso de lluvia en esas últimas vueltas, podrían incluso haberle dado la victoria. Pero no tuvo suerte. El cielo se contuvo y, aunque las últimas vueltas fueron plenas de emoción, con varios incidentes con Pérez como principal protagonista, se mantuvieron las posiciones en cabeza hasta el final.
Para Webber, la segunda victoria de su carrera en Mónaco, que le iguala a puntos en la general con su compañero de equipo, Sebastian Vettel. Para Rosberg, segundo, un meritorio podio y la confianza cada vez mayor de su equipo, que vio como Schumacher se fue desinflando poco a poco hasta consumar su cuarto abandono de la temporada por problemas en la bomba de gasolina. Y para Alonso, tercero, doble premio: el soñado podio en uno de los Grandes Premios más importantes de la temporada, y el liderato en el Mundial.