Fernando Alonso, ante la carrera más importante del año

Alonso prepara en Maranello el que probablemente será uno de los GP más importantes del año.

Y no lo será por los puntos, ya que el piloto asturiano llega mejor situado en la clasificación general de lo esperado a la cita con sus más fieles seguidores, sino porque en Montmeló se descubrirá si podrá luchar por el título esta temporada o si, como ya ocurriera en 2011, tendrá que centrar sus esfuerzos en rescatar el mayor número de puntos con la vista puesta en el próximo año.
Ferrari presentará en el trazado catalán su evolución más importante del año, que incluye importantes mejoras en la zona trasera del monoplaza con las que intentará solucionar los problemas de velocidad punta y carga aerodinámica con los que sus dos pilotos se han enfrentado en las primeras carreras del año. "A nivel de puntos estamos bastante bien, pero en Barcelona hay que dar un paso adelante, debemos dejar la mitad de la parrilla y alcanzar las posiciones delanteras. Contaremos con novedades que esperamos que sean mejores de las que dispongan los rivales. Es difícil hacer pronósticos, pero realmente tendremos que estar al cien por cien", asegura Alonso.
Alonso, que acudió a Fiorano para participar en el homenaje que Ferrari rindió a Gilles Villeneuve en el trigésimo aniversario de su muerte y en el que su hijo, Jacques Villeneuve, pilotó el Ferrari 312 T4 con el que su padre logró el título en 1979, aseguró que su único objetivo, a estas alturas, es pelear por el título del mundo: "Nuestro objetivo es ser campeones del mundo en noviembre, además de hacerlo mejor que en las primeras cuatro carreras", aseguró. Alonso espera que el Gran Premio de España que se celebra este próximo domingo sirva para "cambiar la tendencia".