Villa Olímpica de Río ultima detalles a 30 días de ser abierta a los atletas

La Villa Olímpica de Río de Janeiro, considerada la más grande "de todos los tiempos", ultima detalles treinta días antes de abrir sus puertas a los 17.950 deportistas y técnicos que participarán en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de agosto y septiembre.El presidente del Comité Río 2016, Carlos Arthur Nuzman, aprovechó hoy la presentación de la Villa a los medios de comunicación para anunciar la que será alcaldesa de la instalación olímpica, la exjugadora brasileña de baloncesto Janeth Arcain, medalla olímpica en dos ocasiones.
La exbaloncestista será la encargada de, además de recibir a los deportistas y equipos, "estar pendiente de todo lo que acontezca en la Villa para que nada malo pueda ocurrir y para que los deportistas tengan la mejor estancia posible".
A medida que se acerca la fecha de inauguración, el encargado de las relaciones con los Comités Olímpicos y Paralímpicos, Mario Cilenti, ultima detalles sobre la distribución de las delegaciones dentro de la Villa, una misión que aún no ha concluido pues hay deportistas que aún buscan cupo en los Juegos.
"Empezamos alojando a las mayores y poco a poco fuimos instalando así a las delegaciones menores", explicó Cilenti.
La distribución también se hizo teniendo en cuenta las características culturales propias de cada nacionalidad, como sería la tendencia a respetar el silencio, salir de fiesta u horarios.
Actualmente, la Vila se encuentra al 80 % de preparación, explicó a Efe el director de comunicación del Comité Río 2016, Mario Andrade, ya que falta por terminar la instalación de los equipamientos, amueblar los cuartos y dotar la policlínica.
La Villa cuenta con 31 edificios divididos en siete condominios, que alojarán en sus 3.604 apartamentos a todos los deportistas de las 28 modalidades, además de disponer de servicio de lavandería, correos, cajeros, floristería o tienda de fotografía, entre otros.
Durante los Juegos las distintas federaciones contarán con 13.000 profesionales a su servicio, además de disponer de 50.000 pases para invitados externos como autoridades políticas o monarcas.
Según Andrade, las instalaciones estarán totalmente reguladas y vigiladas para que no se den situaciones de peligro antes ni durante la organización del evento gracias a la presencia constante de fuerzas de seguridad y a las rígidas reglas dentro del recinto.
La Villa fue construida sin recursos públicos por empresas que se adjudicaron los derechos a erguir edificaciones mayores a las permitidas en esa zona y a vender luego los apartamentos.
El COI tendrá derecho a administrarla y operarla hasta después de los Juegos Paralímpicos.
La construcción siguió criterios sustentables que le permiten a la Villa Olímpica contar con 10.000 metros cuadrados de tejados verdes que reducen la sensación térmica, 75 paneles solares para calentar el agua y una estación de tratamiento que permite reutilizar el agua en los jardines y los sanitarios.