Lamborghini Veneno, una bestia parda de 750 caballos

El Lamborghini Veneno es la respuesta de la marca de Sant’Agata a sus rivales de Ferrari y McLaren y todo un súper deportivo con el que celebrar el 50 aniveresario de la fundación de la marca. Es un modelo derivado del Aventador, pero más radical y prestacional que éste.

Y también más exclusivo, ya que solo se fabricarán tres unidades que, por supuesto, están vendidas. Su aspecto es tremendamente agresivo, con múltiples aristas en su espectacular carrocería de fibra de carbono, el mismo material ultraligero que se ha empleado en su chasis y que le permite ser incluso algo más ligero que el Aventador.
Bajó el capó se esconde un propulsor de gasolina de 6.5 litros y 12 cilindros en V, con 750 caballos de potencia que no recurre a ningún sistema híbrido como es el caso del McLaren P1 y lo será también en el Ferrari F70. El conjunto mecánico lo componen la tracción total y una caja de cambios ISG de siete velocidades.

Por supuesto, sus cifras de prestaciones no dejarán insatisfecho a sus tres afortunados dueños: tarda apenas 2,8 segundos en realizar el sprint de 0-100 km/h y alcanza una velocidad máxima de 355 km/h. Impresionante.
Por cierto que el Lamborghini Veneno (que toma el nombre de un astado que en 1914 mató a un torero en Cádiz) también tiene precio: nada más y nada menos que tres millones de euros, lo que le convierte en uno de los coches más caros del mundo. Lo pudimos ver el lunes por la noche en el evento Group Night de Volkswagen y todavía no tenemos palabras para describirlo...