Luis León Sánchez, satisfecho con su equipo en la crono de Burgos

El nuevo líder de la Vuelta a Burgos, Luis León Sánchez, ha reconocido tras enfundarse el maillot morado que el equipo "sabía" que si se ganaba la contrarreloj por equipos conseguiría el liderato y finalmente "se ha podido conseguir".El ciclista murciano era antes de la contrarreloj el mejor clasificado del Astana y el tiempo firmado por el conjunto kazajo ha sido más que suficiente para que le arrebatara el maillot de líder a Carlos Barbero.
Sin embargo, no todo han sido alegrías para el Astana, puesto que Mikel Landa se ha ido al suelo cuando rodaba en solitario tras descolgarse de sus compañeros en la ascensión al Castillo.
A este respecto, Sánchez ha asegurado que la caída del líder de su equipo es una "pena", pero entra dentro de la lógica del deporte. "El ciclismo es así y hay ocasiones en las que pueden suceder estas cosas. Se aceptan y a pensar en el día de mañana", ha señalado.
Eso sí, la caída de Landa podría cambiar los planes del equipo kazajo, que cuenta entre sus filas con hombres tan fuertes como Michele Scarponi, que podría dar alguna sorpresa en las llegadas en alto.
"Scarponi viene de hacer un Tour y lo normal es que esté delante disputándolo, pero ha sido una carrera muy complicada y todos han acabado cansados", por lo que habrá que ver la evolución del corredor italiano, ha añadido Sánchez.
Por su parte, el propio Mikel Landa ha querido restar importancia a su caída, asegurando que ha sido "mala suerte", ya que se ha producido "en la única curva que no tenía peligro" de todo el circuito". "Se me ha ido la rueda de delante y me he caído. Qué le vamos a hacer", ha destacado.