La Eurocup vuelve a ser el objetivo del Valencia Basket

Perder de un punto un partido, que al menos sobre el papel, debería de haberse ganado, es un mazazo más para el Valencia Basket, que vuelve a tener en la Eurocup, su mejor vía de acceso a la Euroliga del año que viene.

El equipo de Perasovic, no es ni de lejos el que fue la temporada pasada, le falta garra, entrega y paciencia. Contra Laboral Kutxa pudo la ansiedad y frente al Basquet Manresa, pesó demasiado la derrota continental, que duele y mucho, en un vestuario que estaba ilusionado con esta competición.
Las opciones para Valencia Basket, pasan de nuevo por la Eurocup. El vigente campeón tiene tiempo para preparar esta competición de nuevo, sin descuidar la liga, donde peligra su puesto en la Copa del Rey, y una competición en la que el equipo no muestra la solidez de la pasada campaña.
El proyecto “taronja” para esta temporada se tambalea. Valencia Basket no se muestra sólido ni en Liga ni en Euroliga y jugadores como Loncar o Nedovic, a pesar de sus 20 puntos ayer, no acaban de encajar en la rotación del equipo.
La exigencia de este torneo pasa factura, y a un equipo que no acostumbra a jugar a este nivel de forma regular más aún. Valencia Basket no tiene el fondo de armario de otros equipos, y basa su juego en una rotación corta, algo de lo que los jugadores se resienten a medida que avanza la competición.
No obstante, el equipo ya ha demostrado saber sobreponerse a estas situaciones, y con jugadores como Rafa Martínez, Sato, Lischuk, Bojan, Van Rossom o Vives, seguro que encuentra la fórmula para volver a ser el equipo que la temporada pasada consiguió la tercera Eurocup de la historia del club.