Toni Nadal, tranquilo con el estado de forma de Nadal

Toni Nadal reflexiona tranquilo sobre el nivel de tenis de su sobrino, le ve bien, "mejor que otras ocasiones en las que al final acabó ganando", analiza al término de una hora de entreno en una pista anexa al complejo de Roland Garros.

"El nivel del juego está, otra cosa son los resultados, que es lo que necesitamos. El nivel de juego es suficiente como para ganar. Hemos tenido un nivel más bajo en otras ocasiones y nos ha ido bien", afirma el entrenador del nueve veces ganador de París.
El duelo de primera ronda contra el francés Quentin Halys (6-3, 6-3, 6-4) no permitió sacar muchas conclusiones, pero Toni considera que fue suficiente para saber que Rafa Nadal está en buena disposición para levantar la décima Copa de los Mosqueteros.
"Hemos jugado mejor que otros años en la primera ronda, a veces hemos tenido más problemas. Ayer hizo un partido bastante bueno, sobre todo a partir de mediados del primer set, empezamos un poco nerviosos pero el nivel fue bastante bueno y en el tercer set fue bueno del todo", dice.
"Le está pegando muy bien a la pelota, las cosas hay que hacerlas cuando vienen los partidos complicados como el de mañana. Está entrenando bien, ayer jugó bien y toda la semana en los entrenamientos el nivel ha sido suficientemente bueno. Ahora es cuestión de competir", señala.
Porque Toni tiene la suficiente experiencia para saber que una cosa es el nivel, que su pupilo tiene, y otra los resultados, que es "lo que necesita".
"El nivel de juego es suficiente como para ganar. hemos tenido un nivel más bajo en otras ocasiones y nos ha ido bien. Ahora tratamos de tener un juego consistente, que es lo que nos ha faltado hasta ahora", comenta.
El entrenador recuerda que en la gira de tierra Nadal encadenó muy buenos partidos con otros de peor calidad, como el que jugó contra el suizo Stan Wawrinka en Roma o la final de Madrid frente al británico Andy Murray.
"Hemos hecho buenos partidos pero ha faltado la consistencia de hacer cuatro partidos iguales. (...) Es un tema de competir, no de juego", asegura.
"La consistencia es falta de victorias. Para mi la sensación es buena para afrontar el torneo. Veremos si se traduce en victorias. También tenía buena sensación en Roma y en Madrid y en Madrid", señala.
Toni Nadal está conforme con las sensaciones, pero no se atreve a decir que eso sea "garantía de victoria".
"Llevamos muchos años aquí metidos y no es para ir dando tumbos. No vamos a dramatizar por tres derrotas, no llegamos pletóricos de confianza, estamos con más dudas porque no sabes como vas a responder, pero el juego es muy bueno", dice.
El talismán puede ser la pista Philippe Chatrier, que Toni reconoce que se adapta bien a las características de su sobrino y que le recuerda los éxitos que ha cosechado en ella durante tantos años.
Toni afirma que el auténtico test será mañana contra su compatriota Nicolás Almagro.
"Es un rival para una segunda ronda de los más complicados que te puede tocar en un sorteo. Prefieres no verlo en estas primeras rondas. Es una de las segundas rondas más duras que hemos tenido en un Roland Garros. Será un test importante que nos permitirá saber dónde estamos", indica.
Pero un examen no concluyente, porque, como recuerda Toni, "en otras ocasiones ha estado bastante mal en las primeras rondas y luego ha ganado" y este año espera dar la vuelta a ese esquema.