Magia contra el dragón

Un aliento abrasador en cada movimiento, en cada acción, en cada intento, en cada lance, en cada cruce. Rasguños de intensidad en cada pelea, en cada enfrentamiento, en cada incisión. El Dragón golpeó primero en esta batalla a un guerrero que no hace mucho derribaba las más grandes bestias, pero que hace tiempo que no compite en las alturas.

El Sevilla sufrió ante el Dragón, que demostró su fuerza, sus recursos, su agresividad, no se dejó domar e incluso se revolvió insolente en el encuentro de ida. Cobró ventaja el Oporto a falta del lance de este jueves en Nervión (1-0).
El batallador Sevilla presentó argumentos menores pero peleó con dignidad en Portugal, no mostró en cualquier caso su mejor cara en ese choque de ida. El rival le apocó y apenas le dejó maniobrar.
Pero el Sevilla no es el Sevilla de Oporto. Quizás el Sevilla no sea tampoco un guerrero del nivel del Oporto hoy día, pero sí es un equipo muy capaz de eliminar al conjunto luso. El mejor Sevilla posible es capaz, muy capaz, de apagar el fuego del Dragón y recortar sus garras. Y eso que afronta este partido de vuelta herido, en desventaja por el gol de Mangala en la ida.
Pero a pesar de todo debe ser optimista el conjunto nervionense, porque sí cuenta con algunos argumentos futbolísticos poderosos y con otro que suele rescatar en noches grandes europeas como la de hoy, la magia. Y qué mejor que la magia, la de Nervión, para hechizar a un Dragón como el Oporto, para intentar transformar una bestia peligrosa en una mansa compañía.
Con la magia de Nervión se han alcanzando cotas impensables, se han remontado eliminatorias que parecían ya idas, ante el Panathinaikos, ante el Lille, ante Osasuna... Todas ellas se revolvieron como un calcetín tras terminar el partido de vuelta en el Sánchez Pizjuán. Hay, pues, precedentes del éxito del hechizo sevillista.
Claro que el rival portugués no anda exento de antídotos. Es un buen equipo, con todas las letras. Puede que no muy regular en su liga, pero que al máximo nivel compite en estratos en el que se instalan pocos equipos. En intensidad, en precisión, en agresividad y en calidad. No deja de ser buena noticia para el Sevilla que falten Fernando y Jackson Rodríguez, dos de sus puntales, pero seguirán presentes otros, empezando por sus dos magníficos laterales o por su magnífico central, Mangala, o por sus costados, el habilidoso Quaresma y el constante Varela.
Intentará también el Sevilla aderezar su magia con otros condimentos. Ya lo dijo Emery, "además de los huevos, juego". Gráfico sin duda. Y cómo plasmar eso en la alineación es el dilema del técnico, que de principio es posible que arranque con un punta, pero que en el transcurso del juego puede que añada uno más (Gameiro). De principio, por tanto, Rakitic ocuparía la mediapunta, con Carriço y M'Bia por detrás. Reyes, reservado, y Marin (sin descartar a Gameiro acostado a la derecha) ocuparían en principio en la banda. El que no estará en el lateral es Alberto Moreno, sancionado tras ver amarilla en la ida. Pero hasta el ataque el equipo parece claro, con Coke, Fazio y Pareja completando la zaga.
El Sevilla, pues, necesita mucho de sus mejores argumentos en esta noche mágica europea. Primero los deportivos, primero los básicos, y luego los mágicos, ya sean en el campo o en la grada. Pero con ellos es posible, la remontada es más que posible. El conjunto de Emery tiene la oportunidad de crecer en una noche lo que en otros casos llevaría meses o incluso años. Pero con la magia, la de Nervión, todo es posible.
 
Alineaciones probables:
Sevilla FC: Beto; Coke, Fazio, Pareja, Fernando Navarro; M'Bia, Carriço; Reyes, Rakitic, Marin; Carlos Bacca.
Suplentes probables: Javi Varas; Diogo, Trochowski, Iborra, Vitolo, Jairo, Gameiro. 

FC Oporto:Fabiano; Danilo, Maicon, Mangala, Sandro; Defour, Herrera, C. Eduardo; Varela, Ghilas, Quaresma.
Suplentes: Kadú; Reyes, Fucile, Josué, Mikel, Martínez, Kelvin, Ricardo.