La historia del reloj del Hamburgo que podría pararse por primera vez
El Hamburgo SV está en estado de alarma. El mítico club del norte de Alemania, el único que nunca ha perdido la categoría y ha jugado siempre en la Bundesliga desde que esta se creó, está viviendo una temporada especialmente complicada, aunque los resultados de las últimas jornadas le permiten cobrar la esperanza.
El cuadro dirigido ahora por Christian Titz marcha penúltimo en la Bundesliga, aunque ahora ha recobrado algo de vida. Tres victorias en los cuatro últimos partidos, especialmente la cosechada este fin de semana en el estadio del Wolfsburgo (1-3), permiten al Hamburgo colocarse a sólo dos puntos de este último, que ocupa la 16ª posición que da derecho a jugar el play off con el tercer clasificado de la segunda categoría. Esa penúltima oposición que ocupa ahora provocaría que descendiera de forma directa.
En Hamburgo, durante estos días, se ha recobrado la esperanza de que el reloj del Imtech Arena no se pare. El estadio del equipo norteño luce un curioso reloj en una de sus gradas en el que cuentan los años, días, horas, minutos y segundos que lleva el equipo sin descender a la Bundesliga 2.
Una cifra que está cerca de llegar ya a los 55 años, pues el campeonato fue creado en 1963 y el Hamburgo es el único equipo alemán que nunca ha descendido. Una cifra que, confían, sigue alargándose durante muchos años más.
Lo cierto es que el Hamburgo lleva varios años coqueteando con el descenso y esta temporada, hasta hace apenas un mes, estaba casi sentenciado. Los últimos resultados sirven para recobrar un halo de esperanza en el Imtech Arena. Sólo le restan dos partidos para obrar el milagro: una visita al Eintrach y recibir al Borussia Monchengladbach en casa. Mientras tantos, el reloj sigue prosigue su curso.
